Dos docenas de saharauis afincados en Valencia acampan frente a la Delegación del Gobierno para que Zapatero intervenga en el conflicto con Marruecos

Primero fue la toma de la sede de los socialistas valencianos, en la calle Blanqueries, y desde hace dos semanas dos docenas de activistas saharauis están acampados enfrente de la Delegación del Gobierno en Valencia para exigir al Ejecutivo de Rodríguez Zapatero que ''tome cartas en el asunto'' en el conflicto que enfrente al Sahara Occidental con Marruecos. Así lo ha explicado hoy a EPDA la portavoz de este colectivo, Nadhira Mohamed, quien denuncia que ya han muerto más de 100 personas y hay cientos de desaparecidos en El Aaiún.

Además, Nadhira advierte que ''las fuerzas marroquíes violan los derechos del pueblo saharaui todos los días y de ello hay muchas pruebas y vídeos en internet''. ''Queremos que el Gobierno español intervenga activamente en el conflicto, pues todo se remonta a la muy mala descolonización iniciada por España. De ahí que ahora tenga que reconocer su responsabilidad y no quedarse al margen'', explica.

Los activistas, que estarán acampados por ''tiempo indefinido'', recuerdan que Marruecos está ''sacando a la fuerza a muchas personas y ha impuesto el veto de información a periodistas extranjeros y alguien que no ha maltratado a nadie supuestamente no puede vetar a periodistas''.

Además de concienciar a la opinión pública española de cuanto acontece en la antigua colonia española, estos saharauis quieren trasladar un mensaje a sus compatriotas que están sufriendo el acoso de Marruecos. ''Queremos que sepan que estamos identificados con ellos en esta causa y queremos trasladarles nuestro apoyo y el de mucha gente de España. Hacemos, a nuestra manera, lo que podemos''.

Otra de las actuaciones más recientes y que tuvo resonancia nacional fue la ocupación de la sede del PSPV en Valencia, donde fueron recibidos finalmente por el secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte. ''Aquel día fuimos con las manos pintadas de rojo y una chica saharaui con nacionalidad española que se había afiliado al PSOE por aquello de la Alianza de las Civilizaciones, fue a darse de baja al sentirse traicionada''.