Ajuntament de Cullera. EPDA.La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Cullera ha decidido
este lunes suspender la semana de cábilas, pero no la caza de patos, como
medida de prevención contra la Covid-19 y para preservar la salud de la
ciudadanía , ya que la población acumula actualmente la tasa más alta de
incidencia desde el inicio de la pandemia.
Con esta decisión, el consistorio quiere insistir en que, tal como ha explicado
el concejal delegado de Caza, Salvador Tortajada, "no se suspende la caza,
sino que no se podrá pernoctar y está prohibido cualquier actividad de ocio y
permanecer en las casetas municipales habilitadas para esta actividad".
La caza se hará de acuerdo con la normativa vigente autonómica y las medidas de
prevención correspondientes, han indicado fuentes municipales.
Se trata de seis casetas de propiedad municipal que el Ayuntamiento cede al
colectivo de cazadores para la celebración de las cábilas y que se mantendrán
cerradas durante toda la semana.
Por lo que se refiere a las casetas de propiedad privada destinadas a tal
actividad, el edil Tortajada ha indicado que "tanto los cuerpos de
seguridad locales como la Guardia Civil velarán por el cumplimiento de las
medidas sanitarias en todas ellas".
"Vivimos una situación pandémica delicada. Igual que se hizo en las
Fallas, con las Fiestas Mayores y otros acontecimientos que hemos suspendido
por prevención, esta también es una tradición que por su idiosincrasia
involucra actividades de ocio difíciles de controlar", ha reiterado
Tortajada.
La semana de cábilas en Cullera estaba prevista del 16 al 24 de enero, una vez
ya finalizada la temporada de las tiradas de aves acuáticas que acaban el mismo
sábado 16 de enero.
Por otro lado, el consistorio también ha suspendido durante los próximos 15
días el mercado no sedentario que se celebra cada jueves en la localidad.
Ambos medidas se suman a las que ya entraron en vigor el pasado 30 de diciembre
como el cierre de dependencias municipales, biblioteca, museos, instalaciones
deportivas, parcos y jardines; la suspensión de toda la actividad cultural y de
la atención al público, que solo se puede realizar mediante cita previa, así
como la prohibición de visitas a la Residencia Municipal de Personas Mayores.
