La concejala de
Cooperación y Migración, Neus Fà bregas Santana, prosigue su visita a
Cisjordania junto a una delegación de cargos públicos para conocer la situación
que vive el pueblo palestino bajo la ocupación y el apartheid
de Israel. Los seis concejales y concejalas y las tres diputadas han sido
invitados por la Asociación de autoridades locales palestinas con el objetivo de
encontrar nuevas vÃas de cooperación con las administraciones del Estado
español y tejer redes con representantes de los ayuntamientos.
La expedición de la que forma parte Neus Fà bregas
ha visitado varias partes del muro construido por Israel, en algunas zonas de
hormigón armado y con una altura de 12 metros, declarado ilegal por el Tribunal
Internacional de Justicia. La delegación también ha visitado distintos campos
de personas refugiadas y ciudades como Ramallah, Belén y Hebrón. «La dificultad
o imposibilidad de desplazamiento, los cortes de agua y luz continuos, las
permanentes muestras de violencia, la vulneración de derechos fundamentales y
la falta de libertad de expresión son algunas de las graves vulneraciones que
el Gobierno israelà ejerce contra el pueblo palestino», ha declarado la edila.
«Este viaje forma parte del trabajo que venimos
haciendo desde el consistorio en materia de derechos humanos y se enmarca en la
declaración de València como espacio libre de apartheid israelÃ, aprobada en el pasado pleno de
mayo», ha recordado regidora después de reunirse con el alcalde de Hebrón, Tayseer
Abu-Snaineh. Hebrón es un municipio de 300.000 habitantes con el que se
trabajará en estos próximos meses para firmar un acuerdo de hermanamiento.
Neus Fà bregas ha explicado que Hebrón es una
ciudad palestina, donde «viven colonos y colonas en el mismo centro de la ciudad,
una realidad que no ocurre en el resto de ciudades palestinas. Este hecho
provoca que Hebrón sea una de las ciudades con mayor Ãndice de violencia hacia
la población palestina, una violencia ejercida por el ejército israelà y por
los colonos y colonas que viven en el municipio. Hay un ratio de 10 soldados
por colono, se han cerrado para las personas palestinas calles principales de
la ciudad, lo que muestra un claro ejemplo del sistema de apartheid en el que está sometido el pueblo
palestino. En 1968 se instaló en Hebrón el primer asentamiento de colonos
ilegal -según el derecho internacional no se puede transferir población de la
potencia ocupante al territorio ocupado- en Cisjordania y a dÃa de hoy esta
situación continúa y se agrava cada vez más».
Según el Consejo Palestino de Derechos Humanos,
actualmente hay 5.900 personas presas palestinas en situación de detención
administrativa, es decir, sin estar imputadas de cargo concreto, ni ser
informadas de las razones de su detención y con la posibilidad de que su detención se
prolongue indefinidamente. Además, cada año Israel detiene a 700 menores. Uno
de los casos más conocidos es el de Ahed Tamimi, una adolescente que fue
condenada por insultar a un soldado israelà a ocho meses de cárcel y que se espera
que sea puesta en libertad en los próximos dÃas.
REUNIONES DE LA
DELEGACIÓN ESPAÑOLA
La primera reunión de la delegación española ha
sido con el alcalde de Ramallah, Musa Hadid, quien ha explicado que, al no permitir Israel
la instalación de la red 3G en Cisjordania, se decidió instalar un sistema
público de wifi. El alcalde ha calificado esta medida como «un gran esfuerzo
económico para el municipio que actualmente contribuye a evitar el aislamiento
de cientos de miles de personas y que estas puedan comunicarse» y «un ejemplo
más del municipalismo para dar respuesta a los derechos de la ciudadanÃa,
aunque las limitaciones de muchas necesidades básicas siguen sin cubrirse
debido a la ocupación».
La expedición también se ha desplazado hasta
Belén. Junto con su alcalde, Anton Salman, los cargos españoles han estudiado
la forma de estrechar la colaboración mediante hermanamientos de ciudades y
otras acciones de cooperación y solidaridad que contemplen la cultura y la
educación. En Belén, el grupo español ha recorrido el campo de refugiados Aida,
«el lugar del mundo más expuesto a gases lacrimógenos donde se está trabajando
a través de distintas disciplinas artÃsticas para ayudar a sus habitantes a
reparar los traumas derivados de la ocupación israelà y a tener unas
condiciones de vida más dignas dentro de unas circunstancias tan duras», en
palabras de Neus Fábregas. «Todos los alcaldes palestinos nos han trasladado la
necesidad de trabajar coordinadamente municipio con municipio y mediante la
solidaridad activa de la sociedad civil».