Padres, madres, alumnos y profesores del colegio Santa Anna del municipio de Quartell han protagonizado un encierro en las instalaciones educativas del centro con el fin de protestar por la decisión de la Conselleria de Educación de suprimir una unidad, lo que supondrá la salida de dos profesores de Primaria y que clases de diferente nivel se junten en un aula y con un solo tutor.
Se trata de la primera actuación reivindicativa que se prolongó hasta las 12 de la noche de ayer con el objetivo de denunciar públicamente el "menoscabo en la calidad de la enseñanza".