Un hombre que tuvo dominada durante 40 dÃas a una chica de 13 años, para tener durante esas fechas relaciones sexuales con ella, someterla a malos tratos y amenazas e inmiscuirse en sus comunicaciones por la red de Instagram y la aplicación Whatsapp, se enfrenta a una petición de 27 años de prisión por los diferentes delitos de los que es acusado.
Junto a la citada pena por delitos de agresión sexual, malos tratos, amenazas, descubrimiento y revelación de secretos y contra la integridad moral, el fiscal pide más de veinte años de alejamiento del acusado hacia la vÃctima y una indemnización de 60.000 euros por los daños morales causados.
Los hechos ocurrieron en Xà tiva (Valencia) durante los meses de noviembre y diciembre de 2016, cuando la menor tenÃa 13 años y el acusado, Manuel G.M., que es mayor de edad, mantuvo una relación con ella que duró 40 dÃas, durante los cuales cometió los citados delitos, según el escrito de acusación del fiscal para el juicio que se celebrará el próximo lunes en la Audiencia de Valencia.
AsÃ, según el fiscal, el acusado, que sabÃa que la niña era menor de edad, "con la finalidad de tener un control y dominación absoluto sobre ella", mantuvo con la joven relaciones sexuales varias veces al dÃa durante el tiempo que duró la vinculación entre ambos, perÃodo en el que la amenazó fÃsicamente e incluso llegó a pegarle en la cara y empujarla, además de gritarle expresiones como "no vales nada" y prohibirle salir con sus amigas.
"El procesado, sin su consentimiento y con ánimo de atentar contra la intimidad de la joven, además de como expresión de su superioridad sobre la mujer, controlaba las comunicaciones telefónicas de la menor, leÃa sus mensajes de Whatsapp, veÃa los contactos que tenÃa, le borraba algunos de ellos, le bloqueaba otros y se hacÃa pasar por ella en determinadas conversaciones. En ocasiones la obligaba a borrar todos los contactos de chicos que tuviera", señala el fiscal en su escrito.
Una vez terminada la relación -cuando la chica, alertada por todo lo que venÃa sucediendo, por fin lo decidió- se hizo pasar por ella en el perfil social de la menor en Instagram, porque la habÃa obligado a suministrarle sus claves, y publicó mensajes ofensivos para la imagen de la vÃctima. Además, desde su propio perfil de Instagram, lanzó mensajes de amenaza hacia ella.