El Consejo de Ministros de este martes ha ratificado la emergencia de las obras de restauración de infraestructuras forestales en Castellón y Alicante para paliar los daños causados por la Depresión Aislada de Niveles Altos (DANA) del pasado mes de septiembre.
Las lluvias torrenciales causaron desprendimiento de taludes y terraplenes, caída de árboles, rotura de badenes y pasos de agua, pérdida de firmes y daños en infraestructuras de prevención de incendios forestales y, según un comunicado del Gobierno, restaurarlo supondrá una inversión de 366.666 euros en Castellón y de 372.399 en Alicante.
Para paliar estos daños, los trabajos previstos incluyen la eliminación de desprendimiento de taludes, la reconstrucción de terraplenes, la limpieza de cunetas, la reparación de badenes y pasos de agua, la reconstrucción de firmes, la construcción de muros de sujeción de los terraplenes y la reparación de las infraestructuras.
Estas actuaciones se realizan en el marco de la normativa sobre medidas urgentes para paliar los daños causados por temporales y otras situaciones catastróficas.
Según las mismas fuentes se atribuye al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación la competencia para declarar zona de actuación especial las zonas afectadas en las materias de su competencia y para declarar la emergencia de, entre otras, las obras de restauración de infraestructuras rurales de uso general, como son las pistas forestales de los montes declarados de utilidad pública.