Imagen de los asistentes. FOTO: EPDAMislata ha vivido hoy un día histórico. El cuartel militar Virgil de Quiñones, historia viva de la ciudad, es también desde hoy una apuesta para el futuro. El Ministerio de Defensa y el Ayuntamiento han firmado esta mañana la cesión del acuartelamiento militar a Mislata, un acuerdo que permite obtener una parcela de cerca de 10.000 metros cuadrados, con dos edificios de dos alturas, que se destinarán a usos sociales y zonas verdes.
Alrededor de un millar de vecinos y vecinas de Mislata han asistido hoy al acto protocolario de la firma celebrado en los jardines del propio cuartel. A pesar de que la mañana se preveía fría, la ciudadanía no ha querido perderse la consecución de este logro histórico, reivindicado durante años por toda la sociedad civil de Mislata, que hoy se ha materializado con las firmas del alcalde, Carlos Fernández Bielsa, y el director del Instituto de Vivienda, Infraestructuras y Equipamiento de la Defensa (INVIED), Fernando Villayandre.
El acto, presentado por Raquel Romero –que curiosamente nació en el antiguo Hospital Militar, como ha explicado ella misma a modo de anécdota- ha contado con la participación de las dos bandas de música de la ciudad, la del Centro Instructivo Musical y la de la Unión Musical de Mislata. Además del momento de la firma, lo más interesante de la jornada han sido los discursos de los dos firmantes, quienes han destacado la importancia de la colaboración entre administraciones para alcanzar acuerdos que redunden en beneficio de los ciudadanos.
El primero en intervenir ha sido Villayandre, en representación del Ministerio de Defensa, quien ha destacado que este acuerdo servirá "para renovar el espacio urbano de Mislata, mejorar el tráfico gracias al derribo del muro que rodea las instalaciones, pero sobre todo para generar nuevos espacios públicos e infraestructuras sociales que garanticen un mejor desarrollo a la ciudad". Sobre la parcela que mantiene el propio Ministerio y que posteriormente enajenará mediante subasta pública, el director del INVIED ha señalado que aportará a Mislata "más actividad económica y más empleo".
El discurso del alcalde, más extenso y de mayor calado político, ha empezado señalando la importancia de este día histórico y compartiendo el éxito con toda la ciudadanía, ya que la cesión del cuartel ha sido una histórica reivindicación social de Mislata. Por eso, se ha comprometido a poner en marcha dentro de unas semanas "un moderno proceso de participación ciudadana, sin precedentes en Mislata, para que el Ayuntamiento y los vecinos, dignos y legítimos dueños de estas instalaciones, decidamos entre todos que uso queremos darle".
Pero la intervención de Bielsa ha dado para mucho más, como por ejemplo para seguir reivindicando una "sanidad pública y de gestión pública", para agradecer el apoyo de las asociaciones vecinales en esta difícil empresa o para destacar la generosidad del Ministerio de Defensa y en especial del director general de Infraestructuras, Eduardo Zamarripa, a quien ha descrito como "alma compartida de este proyecto y desde hoy amigo de Mislata. Este alcalde siempre estará en deuda con este hombre".
Del futuro que le espera al cuartel ha dicho que "cada centímetro de estas instalaciones alberga futuro y esperanza", y aunque serán los vecinos quienes decidan su uso, Bielsa se ha mostrado convencido de que este nuevo proyecto "nos acerca un poco más a nuestro objetivo, hacer de Mislata una ciudad más justa, más social y más habitable".
