El nuevo alcalde de Sagunto sale escoltado del ayuntamiento ante la presión del movimiento Toma la Plaza Morvedre
Los indignados reclaman austeridad a la clase polÃtica y una democracia participativa
M. M. - 11/06/2011
La cadena humana de los indignados en su llegada al ayuntamiento. --FOTO EPDAEl primer edil vuelve al ayuntamiento escoltado. -- FOTO EPDA El alcalde entra en el coche de un concejal. --FOTO EPDA Sentada para evitar la salida del vehÃculo oficial del alcalde. --FOTO EPDALos indignados protestan frente a las puertas del ayuntamiento. --FOTO EPDALa policÃa desaloja a los indignados en momentos de tensión. --FOTO EPDASe vivieron momentos de gran tensión. FOTO M. M.
VÃdeo colgado en youtube por Toma la Plaza Morvedre
El nuevo alcalde de Sagunto, el popular Alfredo Castelló, ha tenido que salir escoltado del ayuntamiento tras el pleno de investidura ante la presión del movimiento Toma la Plaza Morvedre. Los indignados llegaron al ayuntamiento formando una cadena humana y realizaron un gran corro que rodeó el edificio en señal de protesta pacÃfica. Durante el pleno permanecieron congregados frente a las puertas del consistorio. Con música de fondo y coreando frases como "no hay pan para tanto chorizo" o "dónde está el alcalde, el alcalde dónde está", los indignados leyeron un manifiesto en el que reivindicaron "más austeridad a la clase polÃtica, que no hayan imputados en las listas electorales, la reforma electoral y una democracia participativa real", entre otras medidas.
Tras la investidura del nuevo primer edil, los indignados esperaron sentados la salida del popular Alfredo Castelló, con el fin de mostrarle su malestar y exigirle el conjunto de medidas que recoge el manifiesto del movimiento. Mientras, un cordón de la policÃa mantenÃa cerradas las puertas del ayuntamiento para evitar altercados.
Ante la imposibilidad de poder salir, el alcalde abandonó el vehÃculo y volvió a refugiarse en el ayuntamiento por una de las puertas laterales del edificio. Los indignados no cesaron en su causa y siguieron una vez más al primer edil hasta el ayuntamiento. La tensión reinaba en el ambiente y se produjeron varios altercados entre los indignados y la policÃa, en su empeño por desalojar los alrededores del consistorio.