La Spain Kiteboarding League, Copa de España de Strapless & Freestyle, celebrada el pasado fin de semana en las playas de Oliva, ofreció un gran espectáculo marcado por la experiencia de los grandes riders y la soltura y calidad de las jóvenes promesas que han demostrado que el futuro del kite está asegurado.
A pesar de la falta de viento del primer dÃa de competición, en la segunda y tercera jornada del campeonato los riders hicieron disfrutar al numeroso público congregado en la playa de Oliva.
En la categorÃa Strapless, cabe destacar que los jóvenes riders lo pusieron difÃcil a competidores con más drive y más experiencia aunque al final, la primera posición fue para el olivense Kiko Roig, ganador de la SKL Oliva 2019, con un heat perfecto en la semifinal de 10 puntos y unos trucos muy complicados, como el backroll rodeo 5 o el Front shove-it.
La final disputada entre Roig y el residente malagueño Keanu Merten, de tan sólo 13 años, puso de pie al público por la gran calidad de los dos deportistas y la espectacularidad de los saltos realizados. El tercer y cuarto puesto han sido para Deiivid MartÃnez y David MarÃn, respectivamente.
En Freestyle masculino, la final estuvo muy disputada entre los cuatro finalistas competidores aunque el barcelonés David Tonijuan "Handel", con mucha potencia y unos trucos muy limpios, ha quedado primero. El segundo puesto estuvo muy reñido entre Manu de Pfyffer y el best rookie 2018, Adrián Carbonell, siendo la plata para el valenciano en un heat muy igualado, que se dirimió por sólo dos décimas de diferencia. Finalmente, el cuarto puesto ha sido para el malagueño Alex Pastor, campeón del mundo de kite en 2013 y ganador de la SKL 2018.
En Freestyle femenino, Alexandra Torres consiguió una merecida victoria, seguida de la kiteborder canaria Julia Castro, Isabeau Galiart y Ana Chamorro Font que completaron el cuadro con un ajustadÃsimo heat que se llevó finalmente la tiñerfeña.
Por tercera vez consecutiva, la Spain Kiteboarding League convirtió la playa de Oliva en el mejor escenario nacional del kite, con un gran espectáculo que dejó un buen sabor de boca a la organización, competidores y público y a todos los invitados, entre los que se encontraba el campeón del mundo, el brasileño Carlos Mario.
