Sergio Muniesa, portavoz del PP de Sagunt. EPDAEl Partido Popular de Sagunt ha pedido la derogación del convenio con la empresa Aquamed para la puesta en marcha de la desalinizadora, aprobado por los grupos municipales PSOE, Compromís y Esquerra Unida. Desde el partido denuncian que esta "chapuza hídrica" costará a los vecinos más de 40 millones de euros a pesar de que "no hace falta" porque, entre otras cosas, está basado en un estudio "irreal y falso" y la producción es "nula".
Ese estudio "estableció que actualmente nuestra ciudad tendría 100.000 habitantes más que entonces, que tendría 13 millones de metros cuadrados de suelo industrial más que entonces y un incremento de demanda de agua de 1.000 litros por segundo más que entonces, cuando en la actualidad consumimos unos 240 litros por segundo. La cuarta parte de la actual concesión. Y todo para justificar una desaladora que no hacía falta. Simplemente todo mentira", afirman desde el PP.
Según el partido, las declaraciones del alcalde de Sagunt, Darío Moreno, afirmando que hay cuestiones que resolver antes de poner en marcha la planta amenaza a todos los vecinos porque implica seguir adelante con un convenio que "multiplicaría el coste del agua".
"Alegar excepciones formales únicamente, como la falta de justificación de la urbanización, para no hacer frente a los 2,3 millones de euros que nos reclaman y los que nos reclamarán, sin atacar el fondo del asunto después de 5 años de gobierno tripartito denota incapacidad y una pasividad bochornosa por no preocuparse por lo que realmente importa: que no entre en vigor el convenio que deja al Ayuntamiento como único responsable y pagador de los más de cuarenta millones de euros que tiene aparejada esa instalación y que debe asumir directamente nuestro municipio en exclusiva", lamentan.
