Un momento del balance en El Puig. FOTO EPDALa campaña del rasca y gana, que constaba de dos fases; una que se realizó en octubre del pasado año y la otra en junio de este año, ha concluido con un balance más que satisfactorio. Primero por la cantidad de comercios adheridos, más de 30, lo que demuestra la confianza en esta iniciativa municipal. También por el trasiego de clientes que se ha generado en el comercio local, que era el fin último de esta campaña. El factor sorpresa del premio y las altas probabilidades de que "tocase" ha resultado una buena idea para crear tráfico comercial. Han participado empresas de todo tipo: centros de estética, restaurantes, estudios de fotografía, ópticas, comercios, … "La mayoría de clientes entraban preguntando por la tarjeta "rasca y gana" lo que es un indicativo de que esta campaña ha servido como aliciente a la compra", apunta una empresaria participante.
Los clientes, por compras superiores a 10 euros, recibían una tarjeta que "rascaban" para descubrir el premio que podía llegar a los 100 euros.
