El supuesto vertido
contaminante en el polígono industrial de Quart de Poblet,
denunciado por el grupo Compromís, es en realidad una charca de agua
en una zona inundable a la altura de la unión de los barrancos de
Pozalet-La Saleta. Así lo determina un informe técnico de la
Concejalía de Sostenibilidad, dirigida por Juan Medina, del que se
informó ayer en el pleno municipal.
No obstante, al
encontrarse en el ámbito de los dos barrancos, el Ayuntamiento se ha
dirigido a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) instando
a que se refuerce la limpieza y el buen estado de los cauces.
A la luz de este informe,
el edil y portavoz del grupo municipal socialista, Juan Medina,
formuló un ruego, al que se unió la alcaldesa, Carmen Martínez,
dirigido a los representantes de Compromís, a quienes pidió que
ante una situación como esta "se dirijan al
Ayuntamiento y eviten generar una alarma social innecesaria e
injustificada porque nos alegramos mucho de que en este caso se trate
de una simple charca y no haya peligro alguno para la salud, pero si
hubiese sido algo más serio habríamos perdido un tiempo vital para
poder actuar con eficacia, ya que entre la toma de la muestra y la
comunicación al pleno transcurrió un mes".
Compromís detectó lo que
intuyó que podía ser un vertido en el mes de febrero y, sin
notificarlo al Ayuntamiento, sólo se dirigieron al Seprona, tomaron
una muestra el día 29 de febrero y la llevaron a analizar a un
laboratorio privado. Hata la sesión plenaria del 29 de marzo no
trasladaron al equipo de gobierno la existencia de esos residuos y
los resultados de los análisis.
Fue en ese momento cuando
los servicios técnicos municipales intervinieron y elevaron informe,
en el que se especifica que, "del resultado
del análisis, comparándolo con la Ordenanza Reguladora de Vertidos
a la Red Municipal de Alcantarillado, sólo dos parámetros, la DBO
(demanda bioquímica de oxígeno) y la DQO (demanda química de
oxígeno), superan los valores límite permitidos, el resto de
parámetros se encuentran muy por debajo de los valores límite. De
ello se desprende que el agua contiene un alto contenido de materia
orgánica".
La inspección realizada
en la zona reveló que no sólo estaba esta charca, sino otras más,
ya que "teniendo en cuenta el PATRICOVA
(Plan de Acción Territorial sobre Prevención de Riesgo de
Inundaciones en la C. Valenciana), observamos que nos encontramos
situados en una zona inundable, debido a que en esa zona el barranco
de Pozalet deja de tener un cauce definido, y a la vez empieza a
configurarse el barranco de La Saleta".
En consecuencia, se
concluye que se trata de charcas formadas por aguas de escorrentía
acumuladas en la parte en la que no está definido el cauce de ambos
barrancos y que la escasez de lluvias provoca que el agua estancada
se vaya cargado de materia orgánica "de
forma natural".