El Villarreal reconoce a jugadores y jugadoras que cumplen diez años en el club

El Villarreal CF ha llevado a cabo un año más el acto de reconocimiento a los jugadores de la casa que cumplen diez años en el club, en esta ocasión dieciséis futbolistas, entre los que destaca la presencia de Manu Trigueros del primer equipo.

Desde hace unos años el club castellonense reconoce a aquellos jugadores y jugadoras que suman una década, reconociendo así todo su trabajo y trayectoria.

Entre esos dieciséis premiados, destaca la presencia del jugador del primer equipo Manu Trigueros, que llegó al club para jugar en su equipo juvenil en la temporada 09-10 pasando además por el equipo C y el filial, para llegar al primer equipo hace ocho campañas .

Además recibieron este homenaje otros quince integrantes de la cantera: Ramiro Guerra (Villarreal B), Simón Moreno (Villarreal B), Andrei Ratiu (Villarreal B), Josele Martínez (Villarreal B), Carlo Adriano (Villarreal C), Rodrigo Alonso (Juvenil), Jorge Domingo (Juvenil), Jordi Ortega (Juvenil), Naím Beltrán (Juvenil), Jordi Cuéllar (Cadete), Íker Punzano (Cadete), Silvia Gallego (Femenino A), Lucía Vilar (Femenino B), Paula Usó (Femenino B) y Lledó Garví (Femenino B).

El acto contó con la presencia del presidente, Fernando Roig, del consejero delegado, Fernando Roig Negueroles, el vicepresidente, José Manuel Llaneza, y Marcos Senna, embajador del club.

El máximo mandatario explicó que "la idea de este club es la de apostar por la cantera siempre", resaltando que "de los veintitrés jugadores del primer equipo, once han pasado por ella" y que "la pretensión de este club y de este equipo es la de seguir mejorando el fútbol base y que este siga siendo el referente".

Trigueros apuntó que estos diez años son "un orgullo" y aseguró que "no es nada fácil estar diez años en este gran equipo, ya que nadie regala tanto tiempo en un equipo de este nivel que suele estar siempre en las primeras plazas".

Además, Trigueros quiso agradecer "el trato recibido desde el primer día hasta hoy" y reconoció haberse sentido "como en casa y en familia".