En momento difÃciles es cuando el ser humano racional debe estar a la altura de las circunstancias. La solidaridad, la perseverancia, la empatÃa, todo esto, deberÃan ser las caracterÃsticas que deberÃan dirigir nuestros actos como representantes públicos que somos. Mientras que el egoÃsmo y la pseudo-polÃtica barata deberÃa dejarse para otro momento.
En nuestra Comarca puedo decir que las primeras de éstas son las que han prevalecido en las relaciones de todos los Alcaldes, sean del color que sean, poniendo sobre la mesa temas y decisiones muy complicadas de tomar en este momento. Cada dÃa tenÃamos multitud de puestas en común y pedÃamos opinión de los siguientes pasos a seguir. Nos apoyábamos unos en otros con nuestros miedos e inseguridades ya que ninguno habÃa vivido una crisis de este tipo antes y ojalá no la volvamos a vivir, dejando a un lado los recelos que siempre ocasiona la polÃtica.
Creo que un área sanitaria como la nuestra que fue la más afectada por el Covid-19 en un primer momento, ha tenido una reacción ejemplar entrando en el grupo de cabeza en la desescalada y vuelta a la normalidad. La ciudadanÃa ha sido ejemplar con un comportamiento de 10, siempre podemos decir que se ha visto esto o lo otro, somos humanos, y no me equivocarÃa si digo que seguro vamos a la cola de sanciones, algo querrá decir.
Los trabajadores municipales, los agricultores desinfectando, los pequeños comercios, los hornos, etc. han sido el pilar fundamental que han hecho que pueblos pequeños hayamos podido tener el menor contacto posible con el virus, gracias.
Mención aparte merece el personal sanitario. ¡¡¡Gracias, gracias y gracias!!!. No me cansaré nunca de agradecer su sacrificio en tiempos difÃciles poniendo en riesgo su propia salud, estuvieron ayudando a vivir, y en ocasiones a morir, a personas que enfermaron. Solo un pequeño apunte para dar un ejemplo: En Chera, el médico después de estar 24 horas entre consulta y guardia en el Centro de Salud aún se quedó, de forma voluntaria, a pasar la consulta del dÃa siguiente porque nos quedábamos sin servicio. Con personas como esta, y me consta que hay muchos profesionales asÃ, podemos estar tranquilos.
Esperemos que de todo esto hayamos aprendido algo, pero mucho me temo que volveremos a las andadas, sobre todo algunos que ni siquiera han parado de pensar en ellos mismos durante todo este difÃcil trance que nos ha tocado vivir, por fortuna una minorÃa.