Pastora Soler (Coria del RÃo-Sevilla, 1978) aparece en los pasillos del Palau de la Música de Valencia, cargada con bolsas y porta trajes. Se comporta como una más de su equipo, ni mejor ni peor, simplemente una más. Aunque sabe perfectamente que es ella, junto a su manager, quien lleva el peso de esa caravana nómada que va de teatro en teatro ofreciendo arte y cultura. Recibe a los periodistas con una sonrisa y aunque tiene el tiempo justo para realizar la prueba de sonido, se relaja y atiende a la prensa con una sonrisa de oreja a oreja.
-Me resulta muy curioso que a los 5 años comienzas en el mundo del espectáculo.
-Bueno, vamos a matizarlo. Yo me subà a un tablao porque yo, cada vez que veÃa un micro yo lo que querÃa era cantar. Pero de eso de lo que me estás hablando fue en una feria, pero afortunadamente no empecé a cantar a los 5 años.
-Tus inicios como cantante fueron bajo el nombre de Pili Sánchez y ahora eres Pastora Soler ¿Cómo, cuando y por qué se produce el cambio?
-Cuando llegó a mi vida Luis Sanz, que es el descubridor de RocÃo Dúrcal, de RocÃo Jurado, pensó, cuando empezamos a grabar el primer disco, que mi nombre, Pili Sánchez, no le gustaba ya que no tenÃa fuerza ni garra. Él y la discográfica decidieron que Pastora era el nombre adecuado, ya que es un nombre racial, muy relacionado con el folclore, con el flamenco. Y Soler, que fÃjate que es un apellido muy de vuestra tierra, del Mediterráneo pero muy sonoro. ¡Menos mal que me dejaron las iniciales! ImagÃnate en la edad del pavo, acostumbrarte y responder por otro nombre a mà no me gustaba mucho. Pero ahora llevo ya 15 años con él y me le he cogido mucho cariño.
-Empiezas con las sevillanas, después con la copla. La crÃtica te califica como una de las reinas del pop flamenco, pero mantienes las esencias. ¿En qué parte de este embrollo musical te encuentras?
-Yo me siento cómoda haciéndolo todo a la vez y he llegado a la determinación que yo soy asà y que a veces, tenemos que poner etiquetas de lo que somos y hacemos, pero en mi caso, por mi trayectoria, por mi edad y mi tiempo a mi me gustan mucho otros estilos de música. Por todo éso me gusta investigar y me siento cómoda mezclando estilos. No podrÃa hacer un concierto sin cantar copla, balada y flamenco.
-Has hecho duetos muy importantes muy importantes con Manu Carrasco, por ejemplo
-El tema de los duetos es algo que me encanta porque tenemos muchÃsimos grandes artistas. Además nos hemos juntados muchos y de la misma generación como Manu Carrasco, Malú, Diana Navarro, David DemarÃa y, lo mejor de todo, es que hay muy buen rollo entre nosotros. Yo consumo mucha música nacional y sobre todo de estos artistas y cuando llegó el disco 'Bendita Locura' llamé a Carrasco, porque me gusta como intérprete y como compositor y le dije que me escribiese una canción. ¡Y me encantó! Con Malú también colaboro en este disco en directo y ha sido una experiencia maravillosa. Afortunadamente, detrás de un escenario todos somos amigos.
-Me gusta que me hayas hablado de generaciones porque llevas en bandeja a la otra pregunta. Te consideran a la altura de RocÃo Jurado e Isabel Pantoja ¿cómo se te queda el cuerpo?
-¡Que la gente te tengo al lado de estas grandes es un halago! La Jurado para mà ha sido la primera gran revolucionaria de la copla, la que empezó a fusionarla, la que cantó esas canciones de Manuel Alejandro que no dejan de ser coplas pero de ahora, de este tiempo. La que empezó a vestir la copla. Es el espejo en el que nos miramos todas y que me tengan en la estela de 'la más grande', para mà es un honor
-Además de ser toda una triunfadora en España también lo eres en TurquÃa y Egipto.
-Quizás sea por ser tan racial, tan español, tan flamenco. Ten en cuenta que la música árabe tiene alguna similitud con el flamenco y por éso creo que les suena la historia.
-Estás inmersa en esta gira de conciertos por teatros, pero después ¿qué proyectos tienes?
-Estamos casi terminando esta gira que ha sido muy intensa. He ido a ciudades y lugares en los que no habÃa dado nunca un concierto como en el norte y la oportunidad de descubrir a un público y que ese público me descubra a mà es fantástico. La sensación de cantar en lugares como el teatro Victoria Eugenia de San Sebastián ha sido toda una experiencia porque tanto al norte en general como a mà nos ha permitido descubrirnos mutuamente. Venir de nuevo a lugares como el Palau, que es un templo del arte, es siempre un placer. Al final lo que uno quiere es cantar en director y hacer giras y llevar tu música de un lado para otro. Cuando terminemos ésto me tomaré unas vacaciones y me pondré a pensar en el próximo trabajo, que no sé todavÃa cómo será, pero ya arrancaremos motores.
Aunque confiesa que nunca le pondrÃa el nombre de Pastora a su hija, lleva 15 años firmando como tal a los miles de fans que la aclaman después de un concierto. Pastora Soler no ha dejado de ser aquella Pili Sánchez que querÃa triunfar en el mundo del espectáculo hace 15 años. Y no ha dejado de serlo porque la humildad en un artista es su mejor baza. Y ella lo es al mismo tiempo que gran cantante.