La cita con David Otero, o lo que es lo mismo, El Pescao (Madrid, 1980) se produce en uno de los hoteles más lujosos de la ciudad de Valencia. Llega con todo su equipo, un grupo de personas que, como nos confesará más tarde, son como una pequeña familia. Es delgado y luce un look 'grunge' que tal vez no le favorece demasiado. Pero su caracterÃstica fÃsica que más llama la atención son sus ojos. Con su mirada cautiva inmediatamente a todo aquel que se ponga por delante. TÃmido ante un periodista, David Otero dónde realmente se crece es arriba de un escenario, guitarra en mano
-Comenzamos por tus inicios. Cuéntame cómo es aquella historia en la que convertis un bajo en una guitarra o al revés.
Eso pasa cuando tienes 14 años y empiezas a tocar en un grupete y quieres tener un bajo, que en esos momentos no te puedes permitir. Entonces cogimos una guitarra y la desafinamos tanto que sonaba, o eso nos parecÃa, a un bajo. Pero en realidad solo hacÃa ruido.
-El que te hayas enrolado en un proyecto musical en solitario ¿es un 'cese temporal de la convivencia' con el resto del grupo o es un 'divorcio amistoso'?
No, es un cese temporal. De hecho en Sudamérica seguimos con el proyecto de ECDL y vamos a tocar juntos. Aquà en España habÃamos repetido durante muchos años la misma dinámica y nos apetecÃa un cambio, probar cosas distintas, darle otra vuelta al proyecto…Y como cada uno del grupo compone, hace sus letras, decidimos sacar cada uno un disco para ver qué ocurrÃa pero dentro de unos años volveremos a juntarnos otra vez
-Entonces aparece tu disco que se llama 'Nada Lógico' y el cantante se va a llamar El Pescao ¿de dónde sale ese nombre?
El proyecto es El Pescao en sà y está buscado a propósito porque querÃamos hacer un montón de cosas diferentes a lo habitual, cosas más arriesgadas. Nuestra intención era hacer locuras. Si me llamaba David Otero, quedaba como muy serio todo. Por lo tanto tenÃamos que buscar un nombre que diese la posibilidad de hacer esas locuras y El Pescao era el nombre de una canción que estaba incluida en 'Zapatillas' y me pareció el nombre perfecto para el proyecto.
-Y con ese nombre pasas de los grandes escenarios a tocar en lugares más reducidos ¿Cómo se siente uno al acercarse tanto al público de nuevo?
Pienso que es el lugar natural donde tenemos que estar. El proyecto arranca de cero y la gente me ha escuchado cantar en algunos conciertos de ECDL. Me ha visto cantar un par de canciones. La gente tiene que ver este proyecto como si arrancara de cero y me pareció lo más lógico y lo más honesto de cara al público. Si intentara llenar estadios, me equivocarÃa porque ahora mismo estamos empezando.
-Hablas de partir de cero pero en la mochila llevarás cosas de lo que ya arrastras de ECDL
SÃ, por supuesto. Llevo conmigo cierta experiencia que tienes adquirida de muchos años trabajando en este mundo. Ya sabes por dónde van los tiros y qué es lo que te puede pasar porque ya te ha pasado más de una vez. Las cosas te pillan más prevenido aunque te sigues sorprendiendo. También el saber lo qué quieres que es muy importante en esta profesión. En este proyecto tenemos muy claro qué es lo que queremos transmitir de qué manera a través de qué medios, de qué forma… Y eso lo llevamos a cabo directamente nosotros, sin tener un filtro, sin preguntárselo a nadie, lo hacemos todo nosotros. No hay manager, no hay oficina. Somos como una pequeña familia que estamos dándolo todo y es muy bonito ver como crece tu proyecto de esta manera.
-De todas formas imagino que tendrás algún temor
SÃ, el temor a no pasármelo bien. Ese el único que tengo. A no disfrutar de la experiencia. Si no me lo paso bien pero tengo cien mil personas delante, para mÃ, será un fracaso. Si me lo paso bien pero tengo dos mil personas acompañándome, paro mà será un éxito. Es un temor a que las cosas no se hagan cómo yo creo y no funcionen cómo a mi me gustarÃa
-Y en este disco nos encontramos una variedad musical brutal. ¿Se debe a qué no te has definido todavÃa o por qué quieres demostrar que todo se te da bien?
No, creo que es el reflejo de mi personalidad musical. El disco lo he grabado prácticamente todo en mi estudio, haciendo de productor, arreglista… Entonces ha salido muy de mi casa y de la imaginación y de muchas noches en las que me he quedado solo en el estudio para ver qué se me ocurrÃa. Es el reflejo muy fiel de lo que me gusta en la música. Eso era lo que querÃa transmitir, que de mi cabeza podÃa salir cualquier cosa pero bien hecha y que no me siento incómodo a la hora de cambiar de un estilo a otro. No me veo para nada forzado
-¿Cómo surgen o de dónde surgen todas esas letras?
Necesito la noche porque me inspira. Está todo muy tranquilo, no suena el teléfono, no llegan e-mails. No sé porqué pero cuando hay por ahà un medio de comunicación con algo que pueda chequear o mirar no me acabo de relajar y sé que a partir de las 12 de la noche nadie me va a interrumpir. Todo el mundo duerme. Me siento cómodo.
-Tanto trabajo ¿te deja tiempo para hacer otras cosas?
Te queda mucho tiempo porque viajamos mucho. La gente que trabajamos en esto lo sabemos y por desgracia o por fortuna tenemos muchas horas muertas a lo largo del dÃa. Podemos hacer desde ver pelis en la furgoneta o escuchar música, actualizar redes sociales. Cualquier cosa. Hay mucho que trabajar y mucho tiempo que aprovechar.
-¿Qué es lo que esperas del futuro?
Me gustarÃa que fuera con muchos conciertos y hacer llegar mi música a muchos sitios y a mucha gente. Éso es lo que más deseo. Compartir la música con los demás y recibir la energÃa del público cuando estás dando un concierto. Asà me gustarÃa que fuese mi futuro.
Tiene prisa. Quiere relajarse antes del concierto que ofrecerá a sus seguidores en el Velódromo 'Luis Puig'. Pero la gente lo reclama, quieren hacerse fotos con él y decirle lo mucho que les gusta su disco. Entonces se detiene y accede encantado a todas las peticiones. Sabe que, como el gran artista que es, se debe a su público y no puede defraudar. No pasa nada, ya descansará más tarde.