EU
desarrolló en 2004 junto a otras organizaciones, una campaña contra
la instalación de la central térmica de Saggas (Gas Natural), en el
polÃgono quÃmico del Puerto de Sagunto, porque "resultaba altamente
contaminante y la demanda de electricidad se podÃa cubrir con
fuentes de energÃa renovables".
Pues
bien, "casi una década después el tiempo nos da la razón, pues
desde primeros de año, la torre de la regasificadora está quemando
gas constantemente sin producir electricidad, contaminando la
atmósfera y derrochando energÃa. Además del impacto visual y
paisajÃstico, la quema de gas incrementa las emisiones de gases de
efecto invernadero a la atmósfera, perjudicando asà tanto el medio
ambiente, como nuestra salud", critican desde EU.
"Ni el Alcalde-Diputado de Sagunto, que tiene la obligación de
velar por la salud de su ciudadanÃa. Ni la Agencia Valenciana de la
EnergÃa (AVEN) adscrita a la Conselleria de Innovación y
Competitividad, que tiene la obligación de velar
por la planificación energética y el fomento del uso racional de la
energÃa, la mejora del ahorro y la eficiencia energética. Ni
el ministro de Industria, EnergÃa y Turismo (sÃ, el mismo que no ha
hecho nada para evitar el cierre de Galmed), que, pese a la
evidencia, continúa demonizando las energÃas renovables e
incrementado el precio de la luz. Ninguna
de las tres administraciones ha dicho nada, ni ha hecho nada para
evitar este desastre: quemar el gas, porque la demanda de
electricidad de la Central Térmica ha disminuido".
"La
llama de Saggas, visible desde varios kilómetros, nos "ilumina" sobre el
fracaso de la polÃtica energética del Gobierno, que sigue
derrochando recursos energéticos, mientras nos suben el recibo de la
luz", concluye EU.