José Manuel Boquet: ''La desaparición del distrito único en la escuela generará guettos''

José Manuel Boquet Esplugues es presidente de la patronal de la educación privada y privada concertada (Feceval).

-¿Por qué ha realizado Feceval la campaña de concienciación sobre la imposición del distrito único por parte de la Generalitat Valenciana?

-Porque queremos defender una escuela diversa, múltiple, desde un punto de vista ético, moral y cívico. Hay que dejar claro que lo que no existe es una escuela neutral. El profesor sólo con su comportamiento ya está transmitiendo unos valores y siempre hay una carga ideológica. ¿No es lógico que cada familia elija el colegio? Hay un montón de legislación que refuerza esto: la Declaración de los Derechos Humanos de la ONU, directrices de la UE, sentencias del Tribunal de Luxemburgo en las que se condena a países tan neutros como Noruega, Suecia o Finlandia y, por supuesto, la Constitución. Todos ellos dejan claro el derecho de las familias a elegir la educación de sus hijos. Lo más lógico es que los padres elijan con qué ideología quieren que se formen sus hijos y de ahí que debería poder elegir centro.

-¿Por qué ahora la campaña?

-En este momento hay una posible amenaza en la elección del centro y es el gobierno actual el que está propugnando la primacía de la escuela pública sobre la privada y concertada. Se anuncian medidas restrictivas, como el distrito único, el punto de libre disposición por parte de los centros y una planificación escolar conjunta para la pública y privada/concertada.

-Vayamos por partes.

-Respecto al distrito único, se reduce la posibilidad de una familia de elegir centro. Si se está fuera de la zona de influencia es más difícil. Hasta ahora más del 90% había conseguido plaza en la primera opción elegida, independientemente de la zona. Con las zonas se condiciona a las familias, que se ven forzadas a elegir el que les toca. Antes, se daba la circunstancia de la picaresca generalizada que llegaba al alquiler ficticio de viviendas para conseguir colegio en la zona deseada. ¿Queremos volver a la picaresca? La desaparicición del distrito único potencia la generación de ghettos y áreas de élite. Con el distrito único prima la libertad de elección. Respecto al segundo punto, el gobierno anterior durante años permitía que los centros dieran un punto de libre disposición a alumnos según unas características como que fueran hijos de ex alumnos, por ejemplo. Con esta medida, se conseguía que el centro tuviera una continuidad y era algo igual de positivo para los centros públicos como privados y concertados. Respecto a la planificación escolar conjunta para la pública y privada, hay otra imposición de la administración, que va a determinar cuántas vacantes nuevas se ofertan. Va a haber un reparto igualitario por colegios de oferta de nuevas plazas. En los pueblos esta problemática se ve clara y no se respeta la voluntad de las familias. Si hay dos colegios y se amplían en 50 plazas, 25 por colegio, resulta que puede ser que haya una demanda de 15 plazas en uno de los colegio y 35 en el otro. ¿Vamos a impedir que sea así? Es un nuevo ataque a la libertad de elección de centro. En definitiva, imponer el modelo de escuela única es injusto y perjudicará a las familias con menos recursos. Hay otro argumento importante: en el mundo desarrollado, donde el modelo de escuela única existe, va a menos. Por ejemplo, Bélgica, Francia, Inglaterra, Estados Unidos o Chile están desarrollando programas de enseñanza privada gratuita. La escuela única ha sido típica de los países totalitarios como la Alemaniza nazi y la URSS y subsiste hoy en Corea del Norte, Cuba, Venezuela y otros muchos países sudamericanos y asiáticos donde convive la escuela privada de élite y carísima con una escuela pública de pésima calidad.

-¿Cuáles son las consecuencias que puede tener la campaña en las relaciones de Feceval con el Consell?

-No van a mejorar las relaciones porque ya son excelentes. Pretendemos que la sociedad presione a la administración para que respete los principios legales de la libertad de elección de centros por parte de las familias. Si la administración vulnera la legislación, recurriremos a las vías necesarias, incluso las judiciales.