Sensación de sueño no reparador por las mañanas, dolores de cabeza, alteraciones del estado de ánimo o fuertes ronquidos, son algunos de los sÃntomas que presentan las personas que padecen un trastorno del sueño debido a episodios repetidos del cierre total o parcial de la vÃa respiratoria superior cuando duermen.
Para la doctora Susana Soler Algarra, responsable de la unidad de neurofisiologÃa y del sueño del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre, "es lo que llamamos apnea cuando el cierre u obstrucción al paso de aire es total, e hipopnea cuando la obstrucción es parcial. Tras estas interrupciones respiratorias, se recupera la normalidad, generalmente precedida de un fuerte ronquido" y añade "es una patologÃa del sueño e implica que el paciente suele dejar de respirar durante al menos 10 segundos y repetirse numerosas veces mientras se está durmiendo, bien sea por la noche o durante la siesta. En los casos más graves, pueden detectarse cifras elevadas superiores a 300 eventos en una noche".
Según la Sociedad Española de Sueño (SES), la prevalencia de la apnea del sueño se sitúa entre el 4% y el 9% siendo pues una enfermedad tan frecuente como el asma, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) o la diabetes.
Estas pausas u obstrucciones respiratorias generan una disminución de la cantidad de oxÃgeno en sangre y un incremento de anhÃdrido carbónico, muchos despertares no conscientes, sueño fragmentado y disminución de fases profundas del mismo. "La consecuencia más inmediata y objetivable, -comenta la doctora Soler-, es la disminución de un sueño reparador que conlleva excesiva somnolencia diurna, cansancio, trastornos de conducta, metabólicos, asà como cardiovasculares. Son frecuentes los accidentes de tráfico, absentismo laboral e incluso riesgo de cardiopatÃa isquémica".
Mayor porcentaje en hombres
Según la doctora Soler, "es una patologÃa muy prevalente que afecta hasta un 10% de los hombres y aproximadamente a un 4% en mujeres. Con más edad y cuando se supera un Ãndice de masa corporal superior a 30 eres más propenso a padecer un SAHOS, al igual que el consumo de alcohol y sedantes para dormir aumentan el riesgo a sufrirlo".
PolisomnografÃa nocturna
Por esta razón, es muy importante el diagnóstico clÃnico. La prueba de referencia para establecer el diagnóstico del SAHOS (SÃndrome de apnea/hipopnea Obstructiva del Sueño) es la polisomnografÃa nocturna (PSG). "Se trata del registro de una serie de variables neurofisiológicas, respiratorias y cardÃacas que nos permiten conocer la cantidad y la calidad del sueño, asà como la repercusión de las apneas e hipopneas en el sueño", subraya la especialista.
"Durante el sueño y mediante registro polisomnográfico, -explica la doctora-, observamos que las fases N1 y N2 son de sueño ligero y acontecen cuando la persona comienza dormirse y es en esta fase cuando ocurren la mayorÃa de las apneas. En las fases de sueño REM, momento en el que el paciente tiene la mayor relajación muscular, las apneas son más largas y con mayor desaturación", concluye la doctora Soler.
Esta prueba se complementa con la poligrafÃa respiratoria (PR) que es la realización de estudios simplificados que evalúan las variables respiratorias y cardÃacas. La presencia de un número anormal de apneas/hipopneas durante el sueño asociado con sÃntomas relacionados con la enfermedad, establece el diagnóstico de SAHOS y permite valorar y cuantificar la gravedad para prescribir las soluciones adecuadas.