Marta Gómez.-- SERGIO SÁNCHEZ PUERTOMarta Gómez tenía muy claro que su futuro pasaba por el ballet, por bailar. Sabía desde muy pequeña a qué quería dedicarse y no iba a parar hasta conseguirlo. Y después de unos años formándose en escuelas de Danza y conservatorios, Marta, natural de Llíria, puede sentirse orgullosa y presumir de que en París, ha cumplido un sueño
Hasta la capital de Francia se fue para trabajar de 'au pair' en septiembre del año pasado y en seguida entró en la 'Paris Marais Dance School'. En la compañía sigue estudiando y completando la formación artística que recibió en Llíria y Riba-Roja hasta el año pasado.
A través de Facebook y utilizando un teclado que le cambia las palabras españolas en francesas, Marta cuenta que fue en Llíria donde descubrió su vocación. "Cuando quieres bailar profesionalmente das por hecho que vas a tener que irte, más tarde o más temprano, a buscarte la vida fuera de España", afirma desde la Ciudad de la Luz.
Marta, que ha participado en varios montajes de la compañía y ha bailado en teatros como el Toneelschuur Haarlem de Amasterdam o en el Cirque d'Hiver de París cuenta que lo que más le gusta de la capital francesa es que "el arte es visible en todas partes y hay eventos culturales muy buenos y te ofrece oportunidades que muy pocos lugares te dan. Yo he venido a París a probar mis propios límites". Aunque no puede evitar echar de menos a su familia y amigos con los que se comunica a través de internet y los almuerzos del fin de semana en la 'Ciutat de la Música' y que en París no hace.
Marta sabe que el trabajo de bailarina es complicado y notaba como su vida profesional en Llíria estaba limitada. Ahora ha encontrado su lugar porque "he adquirido confianza y noto que estoy avanzando en el baile aunque también sé que me queda mucho camino por recorrer todavía", finaliza.
