La persistencia de la crisis y la eliminación de los 426 euros de ayuda a los parados de larga duración del Gobierno central han disparado a 3.600 las familias que comen gracias al Banco de Alimento de la Comunitat Valenciana.
Este tiene como
objetivo la prestación de ayuda y atención a los centros benéficos de
la provincia de Valencia y Castellón. Una ayuda centrada en la
provisión de productos, almacenamiento y distribución de alimentos
donados por distintas empresas. La última semana de cada mes, a través
del proyecto "Banco de Pobres", se reparten alimentos a las personas
más desfavorecidas de barrios marginales, sin techo, inmigrantes o
familias carentes de recursos económicos.
El perfil que acude al Banco de Alimentos ha cambiado, en algunos
casos algún miembro de familia no tiene renta alguna. En marzo de 2010,
el Banco de Alimentos atendía mensualmente a un total de 1.027
familias. El incremento producido hasta diciembre de 2010 ha sido del
151% pasando a atender en la actualidad a 10.005 personas.
En cuanto a las nacionalidades de las personas atendidas, el 65%
son inmigrantes (46% sudamericanos, 4% musulmanes, 7% subsaharianos y
el 8% europeos de las personas) y el 35% españoles. Asimismo, como
media mensual, se atienden a 228 centros benéficos, que a su vez estos
atienden a 38.394 personas.
"Cada entrega contiene entre 50 y 70 kilos de comida y supone un
verdadero alivio para las economías más castigadas por la crisis", ha
explicado Jaume Serra. Los repartos se dividen en dos tipos: 50 kilos
(para una familia de tres miembros) y 70 kilos (para familias con cinco
miembros) y están compuestos por alimentos de primera necesidad como
leche, aceite, azúcar, arroz, legumbres o pasta.
El conseller de Solidaridad y Ciudadanía, Rafael Blasco ha puesto en
valor el trabajo que realiza el Banco de Alimentos de Valencia que
durante 2010 ha recogido cerca de 3.000 toneladas de alimentos
beneficiando a un total de 10.005 personas, o lo que es lo mismo, a
2.938 familias cada mes cuya media de ingresos oscila entre 120 y 150
euros.
Según el presidente de la entidad, Jaume Serra, "con el apoyo de
las instituciones pretendemos llegar mensualmente a 3.600 familias
incrementando lo que supondría triplicar en un año el número de
personas atendidas". El presidente de la entidad ha realizado estas
declaraciones junto al conseller Rafael Blasco en el primer reparto del
año a 250 familias que ha tenido lugar esta mañana en la sede del Banco
de Alimentos.
El Banco de Alimentos ha registrado en el último mes un incremento
de 1.000 peticiones tras "el anuncio por parte del Gobierno de José
Luis Rodríguez Zapatero que eliminará definitivamente en el mes de
febrero el programa de prestaciones de 426 euros para parados sin
cobertura", ha señalado Serra.
El reparto ha sido posible gracias a la cadena de Supermercados Más
y Más. Durante la mañana también se ha hecho entrega de juguetes para
los niños y niñas de las familias más desfavorecidas. Por su parte, el
conseller ha manifestado el apoyo de la Generalitat y ha querido
agradecer la labor "anónima y desinteresada de aquellas empresas y a
los 84 voluntarios que colaboran con el Banco de Alimentos".
En este sentido, Blasco ha reconocido el trabajo que se está
realizando desde el Banco de Alimentos, que ha definido como "una de
las mejores muestras de solidaridad de la Comunitat Valenciana".
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