El conseller de Hacienda en funciones, Arcadi España, durante la rueda de prensa posterior al Pleno del Consell.EFE- Kai Forsterling
La Generalitat cerró 2022 con un resultado económico patrimonial negativo de 3.206 millones de euros, frente a los -1.200 millones del ejercicio anterior, y una deuda (pasivos financieros) de 9.419 millones, en su gran mayoría por operaciones de refinanciación de los vencimientos del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA).
El pleno del Consell ha aprobado este jueves la Cuenta General de 2022, de la que el conseller de Hacienda en funciones, Arcadi España, ha señalado en rueda de prensa que supone "un hito" en cuanto a gasto social, al que el año pasado se destinaron 16.829 millones de euros, la cifra "más grande de la historia de la Generalitat".
La "contrapartida" de esa apuesta por la inversión social, ha señalado, es que, a falta de la reforma del modelo de financiación, ha obligado a buscar mecanismos de financiación que hay que devolver, principalmente el FLA del Gobierno de España, y por tanto se ha aumentado el nivel de deuda.
Pero la alternativa era sumar "recortes" al aumento de la deuda, ha explicado España, quien ha detallado que en los últimos ocho años la deuda ha crecido un 38'3 % y se ha pasado de 40.000 millones de euros a 55.438, pero se ha consolidado el estado del bienestar, y en los ocho años anteriores creció "un 250 %", de 11.419 millones de euros a 40.063 y además hubo recortes.
Ha señalado sobre la cifra negativa entre los ingresos recibidos y los gastos asumidos que ha pasado de los -1.200 millones en 2021 a los -3.206 del año pasado, en sintonía con el aumento del déficit de la Generalitat, debido a que se ha continuado la apuesta por ayudar a las familias y las empresas mientras han desaparecido aportaciones del Estado como los fondos covid.
No obstante, ha resaltado que cuando el Botànic llegó a la Generalitat ese resultado económico patrimonial era de -4.543 millones de euros, equivalente al 35 % del presupuesto, mientras que ahora representa el 15 %, y ha insistido en que la Administración "no tiene que dar beneficios".
De los 9.419 millones de euros de derechos reconocidos en los pasivos financieros, el 84,5% de estos (7.959 millones) se nutrió de los mecanismos de financiación del Estado, como el FLA y el React-EU-, mientras que los 1.460 millones restantes tienen su origen en préstamos a largo plazo refinanciados por la banca española.
Arcadi España ha recomendado al futuro Consell PP-Vox que continúe en esta "senda" de "consolidación del Estado del bienestar" y de "no bajar la guardia" para mantener durante los próximos las inversiones en sanidad, educación, servicios sociales, políticas inclusivas, empleo o vivienda, a las que en 2022 se destinaron casi 9 de cada 10 euros.
Los 16.829 millones destinados a los servicios públicos fundamentales suponen el 86,3 % de las obligaciones no financieras, que en total ascienden a 19.495 millones, y reflejan que en los últimos ocho años "se ha dado un giro de 180 grados a las prioridades de la Generalitat" para garantizar a los valencianos unos servicios sociales equiparables a la media, ha dicho.
La Generalitat "funciona, responde a sus compromisos y ha generado el mayor escudo social y el entorno más favorable para el crecimiento económico y la generación de empleo de todas las comunidades autónomas", ha aseverado el conseller.
La inversión en servicios públicos fundamentales alcanza el 86,3 % del gasto no financiero, seis puntos más que en 2014 (80,3 %), y supone una subida de 5.362 millones (un 47 % más) respecto a los últimos ocho años, según los datos de la Generalitat.
