La oposición representará al Ayuntamiento en órganos supramunicipales, como los consorcios

Cuando se cumplen apenas dos semanas de la investidura del socialista Voro Costa como alcalde de Gilet, en sustitución de Inma Borrell, que renunció a su cargo y al acta de concejal por discrepancias con su partido, ya se están viendo las consecuencias de la nueva situación municipal, con un PSPV que debe gobernar en minoría los poco más de seis meses que restan de legislatura.

En este sentido, Costa reconocía que están teniendo algún problema con los grupos de la oposición (Partido Popular, Bloc y Agrupación por las Urbanizaciones), como se refleja en la elección de los representantes del Ayuntamiento en los órganos supramunicipales.

Según explica el primer edil, se le ofreció a la oposición la posibilidad incluso de poder asumir alguna concejalía, medida que declinaron justificándolo, según Costa, en lo avanzado de la legislatura, a apenas seis meses de los próximos comicios municipales.

Por eso, Costa no entiende cómo se les planteó posteriormente una moción, firmada por las tres fuerzas de la oposición, que pretendía que no hubiera representantes del PSPV ni en los órganos municipales ni en los supramunicipales, una propuesta que tuvo que ser retirada por no haber sido correctamente presentada.

No obstante, el equipo de gobierno, añade Costa, ha vuelto a convocar esta semana una junta de portavoces en la que se ha decidido que los grupos de la oposición decidan quiénes serán los representantes de Gilet en: los Consorcios de Residuos, Bomberos y del Metro Cúbico, en el Plan de Ordenación de la Calderona y en la Red de Municipios hacia la Sostenibilidad, además del segundo representante, que acompañará al alcalde, en la Mancomunidad de la Baronia.

Costa insiste en su intención de contar con todos los grupos, y matiza, "si no quieren colaborar, que no lo hagan, pero que no nos bloqueen", así como también recordaba que continúan trabajando para conocer cuál es la situación económica real del Ayuntamiento (el endeudamiento en 2009 estaba en el 103%, muy próximo al límite marcado por ley).

"Hay que invertir mucho tiempo para sacar el Ayuntamiento adelante", concluía Costa, que reconocía que aún están en fase de análisis.