Vista general de la residencia Domus VI de Llíria. EFELa residencia de ancianos Domus VI de Llíria (Valencia), investigada por la Fiscalía tras la emisión de unas imágenes con aparentes casos de malos tratos a los residentes, tenía abierto un expediente sancionador y se le había impuesto una multa de 174.000 euros.
El director general de Infraestructuras de Servicios Sociales de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, Enric Juan, ha confirmado que tenían "denuncias previas de familiares" tanto por el trato a los residentes como por deficiencias de la infraestructura y "por ello se le impuso la multa".
Según ha explicado en una comparecencia ante los periodistas, las quejas son de 2019, con la nueva concesionaria -cambió hace dos años- y motivaron que se realizar diferentes inspecciones y un seguimiento y, "en base a eso, hace pocas semanas, se impuso la sanción".
Juan, que ha valorado el impulso de legislatura al seguimiento a las residencias y haber casi triplicado el número de inspectores, ha indicado que este mismo miércoles se ha trasladado a Fiscalía e Inspección de Servicios Sociales los nuevos hechos "por si se tienen que investigar y se incoan expedientes para depurar responsabilidades".
Ha señalado que algunas de las deficiencias de la residencia se mejoraron y ha incidido que ha sido una de las más inspeccionadas en los últimos meses antes de la pandemia -cuatro- e incluso en 2020 y "desde ese momento no hemos tenido más quejas de las familias y por eso no se ha actuado".
El director general ha hecho hincapié en que siempre han actuado de oficio en el marco del plan de inspección o por quejas de las familias y ha indicado que están "en la última fase del expediente sancionador".
Ha confirmado que ya se han puesto en contacto con el Ayuntamiento de Llíria, responsable de la tramitación de los recursos de dependencia, y "ya sabe cómo puede tramitar los cambios si la familia solicita" un traslado de residencia a otra plaza o un cambio de modalidad de prestación y ha apuntado que la Conselleria lo facilitará "al máximo".
Preguntado por si tienen constancia de que las residencias que dependen del mismo concesionario que la de Llíria funcionan peor, ha señalado que "es un análisis" que aún tiene que hacer aunque ha apuntado que "hay una percepción general de que la Covid ha afectado de forma desigual a las residencias".
"El sector de las residencias de personas mayores dependientes en la Comunitat funciona de manera adecuada de forma general. Se dan casos puntuales y es verdad que la incidencia en algunas residencias ha sido mayor en algunos grupos empresariales que en residencias públicas", ha añadido.
Sobre las quejas de la patronal de residencias sobre los planes contra la pandemia, ha indicado que algunas han recibido respuesta y otras lo harán en los próximos días y ya ha habido requerimientos para "subsanar deficiencias por si la pandemia llega a un grado más avanzado".
Además, ha señalado que han impuesto una política "garantista" frente a la pandemia "para que los mayores estén en un entorno seguro y bien cuidados" y por eso, se han mantenido en la fase 3 y "se han adoptado criterios de no liberalizar las medidas de restricción".
Los familiares de los ancianos de la residencia han acudido este miércoles al centro para llevárselos y que sean atendidos en otros sitio y han advertido que denunciarán los hechos.
En declaraciones a los periodistas, Isabel Díaz, hija del anciano que sufrió una caída en el citado centro, ha asegurado que siente "rabia e impotencia" y que en absoluto entiende "cómo se puede hacer eso a un ser humano".
"Hay cosas que se pueden entender, un abandono puntual porque no dé abasto el personal, pero lo sucedido no. Me lo llevo -a su padre- a un hospital, y en función de lo que me digan los médicos actuaré, si está desnutrido o tienen algún golpe actuaré. Tengo claro que denunciaré, eso ha sucedido, no sabemos quién es el responsable, pero esos señores no se atan solos, hay falta de socorro".
Otra mujer, Mariló Madrigal, que tiene ingresado a su padrastro en el centro, ha relatado que su familiar sufrió la amputación de parte de un pié porque no se le curó adecuadamente una herida, y además, se le olvidó a quien lo atendía meterlo en una ambulancia para ser trasladado al hospital.
La hermana de dos internos, Pilar García, ha explicado que "durante alguna temporada no les cambiaban de ropa, o les ponían ropa de invierno a 30 grados, o no les cambiaban las sábanas tras orinarse".
Otros familiares, en cambio, han explicado a los periodistas que jamás han visto "nada raro", ni han tenido constancia de maltrato alguno.
"Nuestro familiar no nos ha dicho nada, está limpio y bien cuidado, con las uñas y las orejas limpias", han explicado otras familiares que no han revelado su nombre.
