LA
UNIÓ de Llauradors denuncia que el nuevo año ha traído una
sorpresa más dentro de la desastrosa campaña citrícola y es que en
la cadena de supermercados Dia todavía se pueden comprar a fecha de
hoy naranjas procedentes de Sudáfrica en un estado lamentable.
Tanto
en tiendas físicas (como se puede ver en el tique de compra de ayer
de un supermercado Dia de Orihuela (Alicante) y otro de hoy en
Pozuelo de Alarcón en Madrid), como en la tienda online a nivel
estatal se pueden adquirir naranjas de la variedad Navel a 1,39
euros/kg cuyo origen es la República Sudafricana.
Esta
circunstancia resulta totalmente ilógica en las fechas en las que
nos encontramos, desmonta todos los argumentos con los que se intentó
justificar la presencia de naranjas en nuestros mercados cuando aquí
no había
y contrasta
con la desastrosa campaña que sufren los productores de cítricos de
la Comunitat Valenciana, con unos precios ruinosos y tremendas
dificultades para dar salida comercial a su fruta.
La
ampliación del periodo de importación de cítricos procedentes de
Sudáfrica hasta el 30 de noviembre, con una progresiva disminución
anual de los precios de entrada hasta su total desaparición en 2025,
puede ser letal para la citricultura valenciana tal y como ha venido
denunciando en repetidas ocasiones LA UNIÓ.
Esa
prórroga del período de importación supone la posibilidad de
entrada de altos volúmenes de cítricos en los últimos días de
esas nuevas fechas, de forma que provoquen la presencia de naranjas
sudafricanas de lamentable calidad en los mercados hasta más allá
de Navidad como se puede comprobar en Dia, con clara afección
directa sobre nuestras producciones que se encuentran en estos
momentos en el mejor momento organoléptico. La posibilidad de
entrada de naranjas procedentes de Sudáfrica durante un mes y medio
más era, es y será, tal y como ha criticado LA UNIÓ, una
herramienta evidente de presión de los precios a la baja en origen
en manos de los intermediarios.
La
situación de la primera parte de la campaña citrícola ha sido un
absoluto desastre para los productores y se ha agravado con la
política comercial de ciertas cadenas de distribución comercial y
el acuerdo con Sudáfrica como ha trasladado públicamente LA UNIÓ
en los últimos meses.
LA
UNIÓ ha realizado una intensa campaña, y la seguirá haciendo, para
denunciar todas las actuaciones abusivas o ilógicas que encuentre.
Desde estas ventas de la gran distribución con naranjas sudafricanas
o de otros países por estas fechas, una cosa legal pero poco ética,
hasta la falta de contrato de compraventa o los cambios en las
condiciones del mismo utilizando excusas absurdas.