LA UNIÓ de Llauradors i Ramaders denuncia que ganaderos pertenecientes a Agrupaciones de Defensa Sanitaria –de los diferentes sectores ganaderos- están recibiendo en los últimos días un escrito de la Conselleria de Agricultura en el que se les indica que no están al corriente de sus obligaciones fiscales cuando sí lo están.
Se trata de los certificados de estar al corriente de los pagos a la Administración Pública (Agencia Tributaria, Seguridad Social y Conselleria de Economía y Hacienda) que sirven para poder acceder estas ADS a las ayudas públicas. Precisamente de la Conselleria de Economía y Hacienda es de donde provienen los problemas burocráticos. A la hora de la solicitud de la ayuda, el ganadero autoriza a la Conselleria de Agricultura a recabar la información de estar al corriente de los pagos con las Administraciones Públicas. En estos momentos reciben notificaciones donde se les dice que tienen deudas pendientes con la Conselleria de Economía cuando en realidad tanto ésta como las consultas en el teléfono 012 de la Generalitat confirman que está todo en regla.
La cosa es kafkiana. Cuando alguien va a consultar su caso en la Conselleria de Economía y Hacienda se le indica que no hay nada pendiente y que por tanto el informe es positivo. Los funcionarios que atienden el servicio de recaudación comienzan a estar hartos de la situación por el volumen de consultas y echan las culpas a sus homólogos de la Conselleria de Agricultura. Paradójicamente en Conselleria de Agricultura sí que constan como negativos los certificados y tras abrir un trámite de audiencia con un plazo de diez días les piden que subsanen la deficiencia y presente los documentos y justificaciones que estime oportunos.
Para certificar la circunstancia de estar al corriente de los pagos que es ajeno al ganadero y fruto de un desaguisado de la Generalitat hay que presentar un escrito de solicitud de estar al corriente de las obligaciones con un un coste de 8,42 euros, aparte de realizar de nuevo los correspondientes trámites burocráticos precisamente en el caso de los ganaderos cuyo trabajo requiere mucha dedicación y que normalmente viven en zonas de interior. Por su parte LA UNIÓ estudia presentar un informe para cada afectado alegando que se está al corriente de los pagos e instando a la Conselleria de Agricultura a que lo compruebe ella misma en la de Economía para que corrijan el error. Así mismo reclamará la devolución de las tasas cobradas.
LA UNIÓ solicitó a la Dirección General de Producción Agraria de la Conselleria de Agricultura a principio de julio que aclarara esta situación, pero no ha obtenido respuesta. Mientras tanto los ganaderos pertenecientes a las ADS siguen recibiendo cartas de no conformidad de estar al corriente de los pagos.
