El embutido se cocinó en las calles de Mislata. EPDAEl domingo concluyeron las fiestas del barrio de San Francisco de Asís de Mislata después de más de dos semanas de actos. Este último fin de semana, como suele ser habitual, tuvieron lugar los actos más multitudinarios y también los más solemnes, con la misa y la procesión de ayer en honor al santo patrón del barrio.
El fin de semana empezaba con la celebración de la fiesta del abonado el viernes por la noche, un día en el que el vecindario sale a la calle para cenar todos juntos y degustar la tradicional torrà d'embotit. La calle Juan de Juanes sirvió una vez más de punto de encuentro para los vecinos de uno de los barrios más activos y participativos de Mislata.
La comisión de fiestas se encargó de cocinar centenares de longanizas y morcillas, que sirven en bocadillos, acompañadas de patatas al horno con ajoaceite y sangría. Un menú sencillo pero apetitoso, con el que la clavaría de San Francisco obsequia a todo el vecindario que colabora en la organización de las fiestas del barrio.
Las fiestas de San Francisco finalizan después de veinte días de actos religiosos, festivos y lúdicos, que han contado con una importante participación vecinal. Los de este fin de semana, con el día del abonado, la cabalgata de disfraces o la procesión volvieron a demostrar la vitalidad de un barrio que cada año se vuelca en la celebración de sus fiestas.
