Fracturas por caídas, esguinces o golpes son sólo algunos de los motivos que hacen que en verano aumenten las consultas por accidentes infantiles en las urgencias pediátricas del Hospital de Manises. Así lo advierte el servicio de urgencias pediátricas de este centro, que indica que durante los meses de junio y julio de este año las atenciones por esta causa han supuesto un 33% de los casos.
"Hay que tener en cuenta que en verano los niños tienen más tiempo libre que dedican al ocio o a realizar actividades deportivas al aire libre, con el consiguiente aumento de los riesgos de accidente, por eso cabe extremar las precauciones de los padres", explica la jefa del servicio de Pediatría del Hospital de Manises, la doctora Inés Costa.
La estacionalidad del tipo de consultas en urgencias pediátricas también se deja sentir en otras patologías. Así pues, aunque las atenciones de urgencia más habituales en niños de 0 a 14 años son las patologías infecciosas, en invierno se deben principalmente por fiebre, catarros o bronquitis, mientras que en la época estival están relacionadas con gastroenteritis que presentan sintomatología de vómitos y diarreas.
En cuanto a las franjas de edad, cabe destacar que el 65% de los menores que acuden al centro por urgencias pediátricas tienen menos de tres años. Según la doctora Costa, "el mayor aumento de afluencia se produce a última hora de la tarde posiblemente por miedo a que se complique el estado de salud del niño durante la noche".
El Hospital de Manises dispone de servicio de Urgencias Pediátrico 24 horas al día durante todo el año y registra una media de 47 consultas diarias, una cifra que también varía en verano dado el carácter metropolitano de la población que recibe asistencia en este hospital. Así, el número de casos es mayor en invierno con una media de 60 consultas diarias, e inferior en verano, donde el número de niños que presentan una urgencia desciende a 35 de media.
Servicio pediátrico 24 horas al día
