Los 15 bancos de cerebros de España reciben unas 500 donaciones al año

España cuenta en la actualidad con quince bancos de cerebros, biobancos de muestras biológicas humanas dedicadas a la investigación de las enfermedades neurológicas que reciben al año alrededor de quinientas donaciones de tejido cerebral.

València acoge este miércoles una reunión precongresual que aborda los retos de los bancos de cerebros españoles, previa al Congreso Nacional de Biobanco que se celebrará este jueves y viernes.

Elena Martinez Saez, coordinadora junto a Susana Teijeira -del biobanco de Vigo- del Grupo de Trabajo de Bancos de Tejidos Neurológicos de la Red Nacional de Biobancos, destaca que los bancos de cerebros, que antes trabajaban de forma independiente, ahora lo hacen en red, lo que les permite compartir información sobre sus investigaciones.

Martínez Sáez, responsable del Banco de Tejidos Neurológicos del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, ha indicado que los bancos de cerebros ofrecen a los pacientes y sus familiares un diagnóstico certero de su patología.

El primer banco de cerebros se creó en 1993 en el Hospital Clínic de Barcelona, y desde entonces se han puesto en marcha un total de quince infraestructuras que suponen una "red muy valiosa para los investigadores".

Tanto los afectados por una enfermedad neurológica o psiquiátrica como las personas sanas pueden ser donantes de tejido cerebral para la investigación.

Los quince bancos de cerebros tienen en la actualidad entre 5.000 y 10.000 muestras de tejidos y reciben alrededor de medio millar de donaciones anuales, tanto de adultos como de niños, aunque según la especialista "harían falta más".

Según Elena Martínez Sáez, se investigan principalmente las enfermedades neurodegenerativas, muchas de la cuales sufren "solapamiento clínico" y hasta que llega el momento de la autopsia no llega a saberse realmente la enfermedad que padecía el afectado.

Ha destacado que participan en proyectos dirigidos a patologías concretas como Coppadis, de Parkinson, o Begesco, para genotipar las muestras, buscar nuevas mutaciones, explorar en el perfil genómico y descubrir variaciones genéticas entre personas de distintos continentes.