Un camarero monta las mesas en una terraza de un negocio de la Comunitat Valenciana. EPDALa coordinadora empresarial del ocio y la hostelería de los barrios de Valencia ha afirmado que el anuncio del president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, de decretar el cierre total de la hostelería y el ocio como medida sanitaria de contención de virus "es una noticia difícil de digerir para el sector, que vuelve a ser al que mayor sacrificio se le exige para mejorar la situación sanitaria".
"Los datos son los que son y, ante la situación sanitaria tan delicada que estamos atravesando, estamos de acuerdo en que hay que tomar medidas, pero que deben pasar por cerrar toda la actividad económica comercial no esencial", puntualizan. "De lo contrario, estamos hablando de una medida drástica arbitraria, injusta y que focaliza, de nuevo, el problema de los aumentos de la curva de contagios en la hostelería. Una decisión que evidencia que se les está yendo de las manos la gestión política de la crisis sanitaria. Siguen dando 'palos de ciego' castigando, de nuevo, a bares, restaurantes, cafeterías y locales de ocio para ganar tiempo. Todo ello, con una factura muy alta para las miles de pymes y trabajadores del sector. Así no saldremos de esta situación, ni de la sanitaria ni de la económica".
Además, explican que "no pueden haber más demoras ni letra pequeña en el PLAN DE AYUDAS para al sector, porque estamos de nuevo en la misma situación que en marzo, pero con la diferencia que, ahora, partimos de una facturación de menos cero. En este sentido, exigimos capacidad para completar el anunciado paquete de medidas económicas, con criterios objetivos, trámites sencillos y dotación de recursos económicos suficientes".
