El president de la Generalitat, Carlos Mazón, durante su intervención en la primera sesión de control de Les Corts Valencianes tras las vacaciones parlamentarias de enero, en la que se le preguntará sobre su gestión, los impagos en las nóminas de algunos trabajadores públicos y la auditoría al sector público. EFE-Biel AliñoEl president de la Generalitat, Carlos Mazón, se ha mostrado razonablemente satisfecho con sus casi siete meses de gestión, pues además de haber acabado con "el Consell más caro de la historia", ha dicho que "por fin hay un Gobierno que no se arrodilla ante el gobierno de Pedro Sánchez".
En su primera sesión de control en Les Corts tras el parón navideño, Mazón ha respondido a las preguntas de los síndics del PSPV, Compromís y Vox, ya que el PP, su partido, ha renunciado a ejercer este derecho y solo lo hará en ocasiones muy contadas y por temas muy concretos.
El president ha defendido el trabajo hecho en este tiempo, frente a una oposición que, a su juicio, no ha aceptado el resultado electoral o vive en un "metaverso", y a la que ha instado a defender ante el Gobierno el soterramiento de la vías del tren a su paso por Alfafar.
Ha entregado a los síndics del PSPV, José Muñoz, y de Compromís, Joan Baldoví, una copia del estudio de soluciones para el soterramiento de las vías, elaborado por la Generalitat, y que cifra en 130 millones la inversión necesaria para llevar a cabo el soterramiento de este paso a nivel, en el que solo el año pasado fallecieron cuatro personas arrolladas por el tren.
El debate sobre los impagos
Desde la oposición, han reprochado al jefe del Consell los impagos a la dependencia, a los trabajadores públicos y a la farmacia; han preguntado cómo van a pagar esas personas la hipoteca, el alquiler o las facturas, y le han planteado si cree que tiene motivos para sonreír o para estar satisfecho.
El president ha afirmado que el Gobierno valenciano ha abonado en enero 44,54 millones de euros a 117.314 personas dependientes, y se han pagado 170.000 nóminas de los trabajadores en plazo y 36.000 expedientes de la renta valenciana de inclusión, mientras que "toda la farmacia ha sido pagada el 1 de febrero".
El síndic del PSPV ha acusado a la Generalitat de haber emitido reconocimientos de deuda sin validez a los trabajadores y ha señalado a Mazón como "el culpable de que miles de familias valencianas no vayan a poder llegar a final de mes".
Muñoz ha exigido también a Mazón que "reconozca que estaba detrás de la guerra sucia" que los socialistas sufrieron durante la campaña electoral, y le ha dicho: "Le acuso de estar presionando a los medios de comunicación. Deje trabajar libremente a los profesionales y respete su independencia".
El síndic de Compromís, por su parte, ha reprochado al Consell que llame "error informático" a la "incompetencia e inutilidad" por los impagos y ha denunciado que esos errores informáticos "no han llegado" al titular de Educación, José Antonio Rovira, al que ha llamado "conseller estrella Michelin" por gastar 3.000 euros en comidas en tres meses.
Mazón ha propuesto a Baldoví hacer un pleno monográfico para repasar los gastos de todos los consellers de Compromís y le ha preguntado qué le parece que el exconseller de Cultura y Educación Vicent Marzà gastara 3.000 euros en un día para ver el Villarreal-Manchester United.
El síndic de Vox, José María Llanos, ha señalado que hay "muchas cuentas que saldar de ciudadanos abandonados" por el anterior gobierno del Botànic y que es necesario un "mayor esfuerzo" en Justicia, Cultura y Deporte y en el sector primario en unos momentos en los que la agricultura "se ve amenazada".
"No podemos entrar en el juego de confrontación" de la oposición, ha señalado Llanos, "ni blanquearles" y han pedido que se priorice la lealtad con los valencianos.
Mazón ha respondido que el compromiso del PP y de Vox es "contarles a los valencianos toda la verdad" y para ello es necesario saber "qué ha pasado con el sector público" y es un "compromiso" de su gobierno.
"Frente al caos heredado habría sido una irresponsabilidad no saber qué ha pasado con el sector público instrumental y no eliminar duplicidades", ha defendido.
Los grupos de la oposición han aludido también a las palabras del vicepresidente primero del Consell, Vicente Barrera, desmarcándose de la iniciativa "Orgull de Comunitat" puesta en marcha por la Vicepresidencia segunda, para señalar que no son una opinión personal sino una posición política, y pedir su destitución.
La réplica la ha dado la vicepresidenta segunda, Susana Camarero, quien ha considerado que el problema para el PSPV y Compromís no son las palabras de Barrera sino que el colectivo LGTBi "está encantado con cómo trabaja este Consell".
"Han perdido la bandera y eso les molesta", ha afirmado la consellera del PP, y ha reconocido discrepancias entre su partido y Vox, como también las había, según ha dicho, en el Consell del Botànic, que compartían el PSPV, Compromís y Unides Podem.
