Uno de los carteles de la campaña. MOLOLa "startup" valenciana de motos eléctricas compartidas de tarifa plana, MOLO, ha iniciado una campaña de concienciación para promover una conducción más responsable entre sus más de 2.000 usuarios activos, pero también entre conductores que no están utilizando su servicio.
La iniciativa se inició en julio y continuará este mes de agosto. Se trata de la difusión de mensajes dirigidos a recordar ciertas normas de tráfico y promover la seguridad vial. Mensajes con un lenguaje desenfadado como "con el casco bien ajustado, MOLO", "si bebo no conduzco, MOLO", "no circulo por el carril bus, MOLO", o "respeto las norma, MOLO" son algunos ejemplos de mensajes que desde la empresa se está empezando a difundir a través de las redes sociales, y otros canales de comunicación directa con el usuario como las newsletters. Además, se dan consejos como ponerse el casco correctamente ajustando la correa, no rallar la visera del caso, o aparcar correctamente.
José Manuel Donate, CEO de MOLO, "creemos que, además de contribuir a la movilidad ágil, sostenible, accesible y fiable, reduciendo el número de vehÃculos propios en circulación y disminuyendo las emisiones de CO2, debemos participar de forma activa en promover hábitos de conducción más responsable, asà como servir de plataforma informativa para recordar ciertos consejos, como por ejemplo no subirse a una moto bajo los efectos del alcohol y otras drogas".
Durante los próximos meses, MOLO prevé incrementar este tipo de campañas con la colaboración de entidades y empresas a través de acuerdos.
Desde que inició su actividad, en septiembre de 2018, los usuarios ya han recorrido en motos, cien por cien eléctricas, más de 1 millón de kilómetros, con alrededor de 253.000 desplazamientos por el casco urbano de València.
La "startup" MOLO lanzó en València, en septiembre de 2018, el primer servicio por suscripción de tarifa plana de motos eléctricas compartidas. Un nuevo paradigma que apunta a revolucionar el uso de motos con cero emisiones, basado en la propiedad compartida, limitando el número de suscriptores con el objeto de que el usuario disponga en cualquier momento de un mayor número de vehÃculos para su uso, como si fuera "propio. Es la primera implantación de este modelo a nivel europeo.
