Vicente Mompó. EPDAEl presidente provincial del PP de Valencia, Vicente Mompó, ha criticado los «ataques continuos» que el Gobierno de Pedro Sánchez está lanzando a los consistorios que están en primera línea de defensa de los intereses de los vecinos.
Mompó ha lamentado que los ayuntamientos «han tenido que hacer frente a la prestación de competencias impropias, como siempre, y encima Sánchez les quita el ahorro para cubrir su despilfarro».
Entiende que «el pago a la buena gestión de los entes locales no puede ser la incautación del remanente porque es sencillamente inaceptable y una burla para los vecinos».
El también portavoz popular en la Diputación de Valencia ha recordado que «durante muchos meses hemos pedido la posibilidad de utilizar el remanente en favor de nuestros vecinos sin ningún éxito para que al final sea el Ejecutivo de Sánchez quien pretenda confiscarlo», ha proseguido.
Para Mompó hay una evidencia y es que «como sucede en otras cuestiones el Gobierno de Pedro Sánchez elude sus responsabilidades y –lejos de cumplir con su papel de garante para que las entidades locales presten a la ciudadanía los servicios públicos básicos– está esquilmando aún más los recursos municipales».
Vicente Mompó ha criticado que «el Gobierno más extenso e ineficaz de la historia democrática puede utilizar 14.000 millones de euros de los ayuntamientos y diputaciones» en una suerte de préstamo que se devolverá hasta en quince años a partir de 2022 y con condiciones sobre en qué se puede invertir.
Entiende que «se va a generar más desigualdad entre los municipios, ya que muchos ayuntamientos no disponen de superávit» y ha censurado que «se ha menospreciado todo el esfuerzo de los alcaldes y alcaldesas por prestar servicios públicos de calidad a sus vecinos».
El «abandono» del Gobierno presidido por Pedro Sánchez a los ayuntamientos «es injustificable porque todo el trabajo que se ha hecho desde los consistorios y corporaciones provinciales para atender las necesidades provocadas por la pandemia de coronavirus no ha tenido réplica por parte del Gobierno».
Mompó ha advertido que «los ayuntamientos están haciendo frente a todas las consecuencias socioeconómicas y sanitarias que ha ocasionado la COVID-19» y por ello estas decisiones del Gobierno «son aún menos comprensibles» y por eso considera «lógico que se haya producido una reacción contraria por parte de ayuntamientos gobernados por distintas fuerzas políticas».
Ha abogado porque el verdadero esfuerzo del Gobierno sea «impulsar una financiación adecuada de las entidades locales a través de una reforma legislativa» que permitiría en una situación de emergencia como la actual «poder seguir prestando con garantías unos servicios públicos como merecen los ciudadanos».
Por último, ha destacado que los ciudadanos merecen que «los sacrificios que hacen puedan servir para que su municipio responda a la asistencia primaria de la que es competente o, al menos, disponga de un fondo de contingencia para las emergencias sociales».
