El conseller de Hacienda y Administración Pública, Juan Carlos Moragues, ha señalado hoy que "la renovada ley de cajas de ahorro apuesta por la profesionalización, la independencia, así como por la transparencia e información del funcionamiento de las mismas".
Asimismo ha querido remarcar que "Caixa Ontinyent se ha convertido en un símbolo de buena gestión financiera, responsabilidad, eficacia y trabajo bien hecho, lo que la ha llevado a convertirse en la primera caja de ahorros del conjunto del país".
En estos momentos, ha recordado Moragues, "la valenciana Caixa Ontinyent y la balear Caixa Pollensa son las dos únicas cajas de ahorro que hay en España, ya que tras el proceso de reestructuración bancaria fueron las únicas que lograron sobrevivir por sí mismas sin necesidad de fusiones ni de ayudas públicas. De las dos, Caixa Ontinyent es la más grande y la que tiene una mayor antigüedad".
Juan Carlos Moragues ha destacado este hecho y ha señalado "la actividad que realiza esta caja de ahorros. Por un parte, una actividad propiamente financiera, crediticia y de recepción de depósitos, que redunda en el beneficio de toda la sociedad (familias, agricultores, empresas, etc.); y por otra parte, una importante función social a través de sus obras sociales y benéficas que supone también un beneficio para todos los ciudadanos, especialmente para los de la ciudad de Ontinyent, su comarca y los de toda la Comunitat Valenciana".
En este sentido, Juan Carlos Moragues ha querido dejar constancia del apoyo del Consell a una entidad "tan significativa, relevante y distintiva como es Caixa Ontinyent, a la vemos como ejemplo de buena gestión y modelo financiero dirigido a las personas y que enfoca sus recursos al apoyo del modelo tradicional centrado en el ámbito rural, los mayores, los depositantes, del comercio minorista, las pymes Tiene todo nuestro apoyo y ofrecemos toda nuestra colaboración a una entidad que es un factor básico para el desarrollo tanto social como financiero de la Comunitat Valenciana".
El conseller de Hacienda y Administración Pública ha realizado estas declaraciones tras reunirse con el presidente de Caixa Ontinyent, Antonio Carbonell, el director general, Vicente Penadés, junto a la directora general del IVF, Mariona Roger y realizar una visita a las instalaciones del Centro Culturar Caixa Ontinyent.
Nueva Ley de Cajas
Durante el encuentro, el conseller de Hacienda se ha referido a la Ley de Cajas aprobada por el Consell para adaptar la legislación valenciana a la normativa de carácter estatal de la ley 26/2013 de 27 de diciembre, y ha indicado que "aumenta el control, profesionaliza la gestión, fortalece el gobierno corporativo de las entidades y es una apuesta por la independencia y la transparencia".
La nueva normativa aborda un redefinición de las cajas de ahorros y contempla una limitación de su ámbito de actuación, tanto territorial como funcional, "volviendo a recuperar la vinculación con el territorio, el comercio minorista y el apoyo a las pymes".
Moragues ha subrayado que también refuerza el componente de profesionalización exigible alos miembros del consejo de administración y de la comisión de control de las cajas, para lo cual, entre otros aspectos, se introduce la figura del consejero independiente asignándole una posición predominante.
Juan Carlos Moragues ha explicado que "se han incrementado los requisitos de idoneidad para todos los miembros del consejo y de la comisión, así como para los directores generales y responsables de las funciones de control interno y quienes desempeñen puestos clave en la actividad diaria de la caja, asimilando las exigencias a las de los bancos".
"También hemos reducido el porcentaje de participación de las administraciones públicas en la configuración de la Asamblea General y se aumenta paralelamente el peso de la representación de los impositores", ha indicado el conseller.
La nueva ley introduce asimismo una nueva incompatibilidad, de acuerdo con la normativa básica del Estado, consistente en que no podrán ser miembros de los órganos de gobierno de las cajas de ahorro quienes desempeñen cualquier cargo ejecutivo en partido político, asociación empresarial o sindicato, "lo que supone un avance indudable hacia la profesionalización y despolitización de estas entidades".
Por lo que respecta a la Obra Social, de conformidad con la legislación básica, se determinan como destinatarios a los impositores, los empleados de la caja, los colectivos necesitados y los fines de interés público. Asimismo, se incorpora alguna especialidad que deberán cumplir las fundaciones que gestionen la obra social de las cajas, al objeto de garantizar que los fondos constituidos por las cajas se apliquen al mantenimiento y desarrollo de las actividades propias de la obra social.
Esta nueva normativa es de aplicación tanto a Caixa Ontinyent como a las fundaciones surgidas por la transformación de las cajas de ahorros Bancaja y Caja Mediterráneo, o las constituidas en su día para la gestión de la obra social, como la Fundación Caja Castellón.
Tanto en relación con la caja de ahorros como con respecto a las fundaciones citadas, la normativa valenciana asigna una función supervisora y de control de su actuación al IVF (Instituto Valenciano de Finanzas), en el ámbito de las competencias de la Generalitat y en el marco de la legislación básica del Estado. Todo ello, sin perjuicio de las competencias asignadas legalmente al Protectorado de fundaciones.
