Mujeres policías locales de diferentes comunidades autónomas y de fuera de España han reivindicado "un cambio de paradigma" en el ejercicio de su profesión que "transite desde un cuerpo de Policía de la seguridad hacia otro del cuidado", según ha quedado de manifiesto en las conclusiones del II Congreso Internacional de Policías Locales, organizado por la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias (AVSRE).
El director general de la Agencia, José María Ángel, y la directora general del Instituto Valenciano de las Mujeres y por la Igualdad de Género, María Such, han asistido a la clausura del Congreso, que ha reunido a más de 300 profesionales del ámbito de la Seguridad y las Emergencias.
El director de la AVSRE ha agradecido a los asistentes su participación, que "ha servido de foro de reflexión y punto de encuentro inter generacional, y que ha visibilizado la evolución de los roles dentro de los cuerpos de policía". Ángel ha animado a las mujeres a seguir trabajando en "la conquista del poder en su profesión" al entender que "es el siguiente gran reto derivado de legislaciones que las promocionen".
Por su parte, María Such ha destacado "la lucha, tenacidad, y empeño de todas las mujeres policías que son ejemplo en muchos otros ámbitos donde son minoría". Les ha animado "a transformar estos cuerpos de seguridad y a contar con la complicidad de los hombres porque ellos son imprescindibles".
En la víspera del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, otra de las conclusiones del congreso ha puesto de manifiesto cómo la profesión de Policía está dominada por "valores masculinos" y, por tanto, "las cualidades socialmente consideradas femeninas han tenido dificultades para ser aceptadas".
Las mujeres policía reunidas en el congreso también han querido poner el acento en la figura del Policía de Proximidad "como una fuerza policial presente en las calles que trabaja con un enfoque proactivo para la prevención del delito y la seguridad de la población respetando los derechos humanos y oponiéndose a la discriminación y delitos de odio".
Por último, en las conclusiones también se ha abordado de manera especial la problemática de la violencia de género y la necesidad de trabajar de forma coordinada e integrada por parte de los servicios de acogimiento y tratamiento de las víctimas.
De esta manera, se han formulado propuestas de mejora en el ámbito social y policial encaminadas a que la protección y acogida de víctimas pueda ser anterior a las denuncias; profesionalización especializada en primera intervención; y dotación de instrumentos legales que permitan un control más exhaustivo de los movimientos del agresor.
En cuanto a las mejoras en el ámbito judicial, se ha reclamado que se aplique la perspectiva de género y se implementen los derechos recogidos en el estatuto de la víctima y en el Convenio de Estambul, ratificado por España.
