Hace unos dÃas
se celebraba el
DÃa de la Mujer. Siempre he sido contrario a este tipo de
celebraciones que
pretenden poner en valor algo que lo tiene por sà mismo.
Pienso que el papel
que las mujeres juegan en esta sociedad se reivindica por sÃ
mismo, sin necesidad
de conmemorarlo en un dÃa concreto. ¿Ha felicitado Vd. hoy a
alguna mujer? Pues
seguro, seguro, que su papel ha sido hoy tan importante como
lo era el pasado
miércoles.
Ahora bien,
tampoco soy
partidario de llamar "polÃticas de igualdad" a aquello que no
lo son. Viene
esto a cuento por el anuncio de la consellera Bravo de
utilizar el criterio de
género para desempatar en el acceso a puestos de la función
pública (en "áreas
masculinizadas"). Si eres mujer, el desempate te favorece. Si
eres hombre, quedas
fuera solo por serlo. No se ha dicho qué va a pasar en las
"áreas feminizadas",
como es el caso de la sanidad. Supongo que ahÃ, el desempate
jugará a favor de
los hombres, aunque no se haya indicado asà de manera
explÃcita.
Recuerdo cuando
en el colegio le
daban ventaja al equipo que peor jugaba para empezar el
partido con igualdad: "Os
damos dos goles de ventaja". Y se los merecÃan, porque luego
les caÃa la
intemerata de cinco, seis o doce goles en contra. Eran malos
de verdad. Ahora,
la sociedad pretende alcanzar la igualdad de las mujeres
dándoles ventaja antes
de la salida. ¿De verdad eso se considera igualdad?
Sinceramente, me parece más
una discriminación previa que una polÃtica de igualdad de
oportunidades.
Debemos
encargarnos de otras
cosas, si realmente queremos alcanzar la igualdad. Debemos
avanzar en materia
de conciliación de horarios, de apoyo a la maternidad, de
prevención de la
violencia en el hogar… Pero no darles ventaja porque, si el
resto de factores
no jugasen en su contra, no la necesitan. No son ese equipo de
patosos que
perderá el partido, sea cual sea el resultado al inicio. Se
han preparado, se
han integrado, se han hecho fuertes y, si somos capaces de
diseñar una sociedad
de respeto hacia esos valores, cualquier dÃa de estos la
ventaja nos la tendrán
que dar a nosotros.