Con este proyecto, además de restaurar la vegetación
litoral, AE-Agró quiere minimizar la pérdida de arena que padece esta playa de
l'Horta Nord y fomentar el turismo de naturaleza.
Como ocurre en la montaña después de un incendio
forestal, las playas sin vegetación padecen una constante pérdida de suelo,
concretamente de arena, provocada por el viento y las olas del mar. Por eso, el
año pasado el colectivo comarcal de Acció Ecologista-Agró Horta Nord, con la
colaboración del Ayuntamiento de Puçol, puso en marcha un proyecto para conservar
la flora dunar de la playa de este pueblo y minimizar asà la pérdida de arena.
La
iniciativa consistió en crear dos zonas cerradas para proteger la flora dunar
y, además, se realizó una plantación de especies propias del litoral
mediterráneo, algo que permitió reintroducir con éxito el lirio de mar en esta
playa.
El
pasado domingo AE-Agró, con la colaboración del consistorio puçolenco y del
Club de Submarinismo Trotafons, convocó un nuevo voluntariado para continuar
restaurando la vegetación dunar de este pueblo. Más de 50 voluntarios
participaron en esta actividad, que tenÃa dos objetivos: ampliar la zona de
actuación del proyecto y también la biodiversidad de la playa.
En
primer lugar, los participantes en esta restauración ambiental crearon tres
nuevas zonas cerradas para proteger la flora dunar y, con ella, la arena.
Gracias al esfuerzo de los voluntarios, ya hay cinco zonas cerradas en la
playa, que ocupan prácticamente un kilómetro del litoral puçolenc, muy cerca
del Marjal del Moro.
Una
vez instaladas las nuevas zonas cerradas, los participantes en la actividad
protagonizaron una plantación para incrementar la biodiversidad de la costa de
Puçol. En total, sumando todos los plantones y bulbos, se plantaron 400 plantas
de ocho especies distintas de flora dunar, suministradas por los Viveros del
Saler del Ayuntamiento de Valencia: barrón o carrizo (Ammophila arenaria), mansega marina (Cyperus capitatus), junquillo (Elymus farctus), cardo marino (Eryngium maritimum), algodonosa (Otanthus maritimus), lirio de mar (Pancratium maritimum), corregüela marina (Polygonum maritimum) i Sporobolus pungens.
Si
esta plantación tiene éxito, se incrementará la biodiversidad de la playa en
prácticamente un 50%, ya que varias de ellas se habÃan extinguido en Puçol,
donde hasta el pasado domingo podÃamos encontrar sólo diez especies de flora
dunar autóctona del Mediterráneo.
Además
de minimizar la pérdida de arena e incrementar la biodiversidad de la playa,
desde AE-Agró consideramos que este proyecto puede ampliar el espectro de
visitantes de la playa de Puçol, por su proximidad al Marjal del
Moro tiene un gran potencial de turismo de naturaleza, especialmente
el ornitológico. Este turismo, a diferencia del convencional, no se
concentra sólo en verano, sino que puede aportar visitantes durante todo el
año, incluido el invierno, completando asà la oferta turÃstica de Puçol.
Por
tanto, hay que potenciar más el turismo de naturaleza con actividades como la
del pasado domingo y proyectos como el de la restauración de la flora dunar, ya
que más de 3.000 personas vieron, sólo a través del Facebook de AE-Agró, las
publicaciones vinculadas a la convocatoria del domingo. Y no podemos olvidar
que la mayorÃa de los participantes no eran vecinos de Puçol, sino turistas que
visitaban por primera vez la playa, gracias a esta actividad.