La
vicepresidenta de la Diputación y responsable del Área de Bienestar Social,
Patricia Puerta, está trabajando con la dirección provincial de Cruz Roja para
redefinir y mejorar la colaboración que la institución mantiene con la ONG
adaptándola a la nueva realidad generada por la crisis del Covid-19. Será
mediante un convenio que tendrá 120.000 de euros de presupuesto y que se
adherirá al Plan Responde frente al COVID-19 que impulsan el Gobierno de España
y Cruz Roja Española.
El
Plan Responde está concebido para atender a los colectivos más vulnerables en
municipios de menos de 6.000 habitantes de la provincia de Castellón: enfermos
crónicos, personas mayores de 65 años y menores de 16 años con riesgo de
vulnerabilidad.
El
convenio contemplará distintos servicios como llevar medicinas a las personas
vulnerables que residen en municipios sin oficina de farmacia, proveer de un
kit semanal de higiene básica y otro de alimentos no perecederos a quienes lo
necesiten y el acompañamiento de soledad.
El
primer paso hacia el nuevo programa de atención a colectivos vulnerables de los
pequeños municipios se dará en el pleno del próximo martes en el que se
aprobará el cambio de denominación de Repoblem a Responde.
La
vicepresidenta Patricia Puerta ha manifestado que «trabajamos para ofrecer el
mejor servicio posible a las personas que se encuentran en situación de
vulnerabilidad poniendo el foco de una manera muy especial en los pueblos más
pequeños, en los que tenemos que hacer todo lo que esté en nuestras manos para
llegar hasta donde sus ayuntamientos no pueden hacerlo».