Peligra la entrada del Club Scooter Diverse en la liga de la Federación Valenciana de Patinaje ante el lamentable estado del skate park de Port de Sagunt

El Club Scooter Diverse ve peligrar su participación el la inminente liga de scooter que la Federación Valenciana de Patinaje pretende iniciar en septiembre, por el lamentable estado en el que se encuentra el skate park de Port de Sagunt, en la que entrenan.

"Tres años de trabajo desde que se fundó el Club de Patinaje Diverse, primero en toda España en estar federado en esta modalidad, tres años esperando y trabajando para llegar poder hacer el sueño realidad de crear una liga regular de scooter donde riders de otros clubs puedan competir en igualdad de condiciones con chavales que practican otros deportes dentro del municipio saguntino, pueden verse tirados por la borda por el estado de semiabandono en el que se encuentra el skate park local", lamentan desde el club.

"Esta instalación, que en el registro figura como "plaza municipal" y no como instalación deportiva, lleva muchos años siendo punto de encuentro para hacer botellones, para realizar grafitis, para pasear a los perros y todo tipo de acciones que para nada tienen que ver con el hecho de practicar un deporte, que es para lo que se construyó. Si sumado a esto, contamos con el hecho de que hasta hace tres años ningún club había reclamado dichas pistas para realizar entrenamientos dentro del ámbito federativo, da como resultado una instalación que más que una pista de patinaje parece un campo de batalla", critican desde el club.

"Si bien es cierto que en los últimos meses la Concejalía de Deportes ha resuelto algunas pequeñas deficiencias, no dejan de ser del todo insuficientes ya que lo que se demanda es una actuación global para poner las pistas al nivel de las que diariamente están creando en los municipios de los alrededores", afirman.

Son los propios miembros del club, la directiva y los monitores, los que cada fin de semana limpian, barren y secan todo tipo de suciedad que allí se acumula, para poder entrenar con niños, desde los 4 años hasta los 16. "Todo esto hace que el sueño de poder ser el primer club en inscribirse en la liga valenciana de scooter se vea truncado ante la pasividad de los responsables de estas instalaciones deportivas", destacan.

El club ha empezado una campaña de recogida de firmas que pretende llevar al pleno municipal para pedir una solución urgente. "Tres años en estas condiciones ya son demasiados, y más aún cuando se corre el riesgo de perderlos, y quedarse fuera de lo que en principio era su principal objetivo, contar con una cantera que pueda participar al mismo nivel que el resto de clubs, en la primera liga regular de scooter de todo el territorio nacional", concluyen desde el club.