Para celebrar el día del abuelo, el jueves 26 de julio, los niños de la Escola d'Estiu visitaron a los usuarios de la Residencia de la 3ª Edad y Centro de Día donde interpretaron para ellos tres play-backs. Con la música como excusa, niños y mayores disfrutaron de ese día tan especial para ambos y llenaron de alegría y felicidad la Residencia de la 3ª Edad.
Sobre las 10 de la mañana, alrededor de unos 15 niños de la Escola d'Estiu, entre los siete y diez años, llegaban a la Residencia dispuestos a transmitir el espíritu juvenil y su alegría a los usuarios. Disfrazados, maquillados y muy metidos en su papeles, se dispusieron en el salón del edificio, donde interpretaron canciones conocidas por todos, tanto niños como mayores, como la Chica Ye-Yé de Conchita Velasco, alguna de Xuxa o del musical Grease.
El acto también contó con la presencia de Eloísa Rosa, concejal de Bienestar Social, quien, en calidad de concejal pero sobre todo, como abuela, dirigió algunas palabras a los presentes.
Al finalizar el play-back se obsequió a los niños con caramelos y zumos y, aunque les habría gustado quedarse por más tiempo junto a los usuarios del centro, a las once en punto tuvieron que irse hacia la Casa de la Cultura, donde tenían otra actuación. "A pesar de tener una agenda super apretada y haberles avisado con poca antelación, los niños hicieron el esfuerzo por venir", explica Cristina García, educadora social y trabajadora de la Residencia de la 3a Edad y Centro de Día.
Cristina afirma que "los usuarios de la Residencia quedaron encantados con la visita de los jóvenes porque, aunque son mayores y necesitan la rutina, como a todo el mundo, también les gustan las sorpresas. Este tipo de visitas, tanto por parte de gente del pueblo como por la gente de fuera, les dan mucha salud y les ayudan a sentirse parte de la comunidad, lo que contribuye a fomentar su arraigo".
Así pues, un año más los niños de la Escola d'Estiu consiguieron su objetivo: llenar la Residencia de la 3ª edad con el espíritu alegre, inocencia y ganas de vivir que caracterizan a la niñez. Porque juventud y vejez no tienen por qué estar reñidas y menos, en un día tan especial.
