El secretario general de Podem en la Comunitat Valenciana, Antonio Estañ. EFE-Archivo
En la Comunitat Valenciana, ha agregado, las fuerzas progresistas tienen el reto de seguir manteniendo su fuerza en la segunda legislatura y ser "la garantía para evitar que un bloque de derechas pueda plantearse como alternativa".
Estañ ha hecho estas declaraciones hoy en Castellón, donde se ha celebrado la reunión de la ejecutiva de Podem en la Comunitat Valenciana, en una rueda de prensa acompañado por Fernando Navarro, candidato de Podem a la alcaldía de Castellón y por Irene Gómez, cabeza de lista autonómica por la provincia de Castellón.
El dirigente de Podem ha asegurado que "la esperanza y anomalía que era España respecto al resto de Europa por no tener partidos declarados de extrema derecha empieza a romperse. Lamentablemente, parece que empiezan a normalizarse determinadas ideas de extrema derecha contra las que hay que poner diques progresistas centrados en la justicia social".
Para Estañ no se puede tolerar que se normalicen los discursos xenófobos y machistas y "no podemos tolerar que la agenda mediática y política esté dominada por este tipo de ideas que lo que hacen es confrontar a ciudadanos y promover la lucha del último contra el penúltimo".
Ha indicado que Podem piensa que "hay que agradecer a los compañeros de Adelante Andalucía por haber planteado una alternativa a tantos años de "susanismo", aunque ha reconocido que el resultado "no ha estado a la altura de las expectativas".
Ha comentado que la campaña de Adelante Andalucía "ha sido muy positiva" y ahora "toca valorar por qué no se ha conseguido ampliar el espacio político y cuáles han sido las causas de la desmovilización que se ha dado en el bloque progresista".
Estañ ha asegurado que "hay que poner de manifiesto ese castigo al tacticismo electoral, ya que desde el Partido Socialista andaluz se apostaba por unas elecciones anticipadas de perfil bajo y la respuesta ha sido la abstención o el traslado del voto hacia Ciudadanos".En consecuencia, ha añadido, "el bloque de derechas no se amplia pero sí se radicaliza".
Esta situación de pérdida de fuerza de los partidos progresistas "es consecuencia de la vía andaluza, que ha apostado por acuerdos con Ciudadanos y no con fuerzas como Podemos, como se ha hecho en la Comunitat Valenciana", donde "hemos llegado a un escenario de cooperación entre fuerzas progresistas para ampliar los derechos" de los ciudadanos.
