El president de la Generalitat y secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, preside la reunión de la Comisión Ejecutiva Nacional (CEN) de los socialistas valencianos. EFE- Biel Aliño
El president de la Generalitat y secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, ha afirmado que su partido va a "luchar en positivo para tener el mayor apoyo posible" en las elecciones autonómicas del 28 de mayo, en las que todas las formaciones políticas intentarán llevar su proyecto "hasta las últimas consecuencias".
Puig, que se presenta a la reelección para un tercer mandato, se ha pronunciado así tras presidir este martes la primera reunión de la Comisión Ejecutiva Nacional de los socialistas valencianos tras la convocatoria electoral, en la que se han fijado las líneas estratégicas para la precampaña y la campaña, que se centrarán en reivindicar la mejora que ha vivido la Comunitat desde 2015.
Preguntado por las críticas a la aspiración del PSPV a gobernar en solitario tras el 28 de mayo de la síndica de Compromís en Les Corts, Papi Robles, quien dijo que "milagros, a Lourdes", Puig ha señalado: "Yo tengo gran respeto por todas las religiones, y esta Semana Santa muy especialmente por la verdadera".
Ha insistido en que serán los ciudadanos los que decidirán, igual que en los últimos ocho años decidieron que hubiera un Gobierno de coalición, si bien trabajarán para que el proyecto socialista tenga "las máximas adhesiones posibles", porque aspiran a representar a "una inmensa mayoría" de la sociedad valenciana.
Para Puig, ha llegado ya el momento de "abrir la conversación" con la sociedad valenciana para reivindicar la consolidación del cambio que se ha vivido en los últimos ocho años y ofrecerle un proyecto "para la mayoría social, que además está basado en la estabilidad, el diálogo y el respeto".
Ha defendido que la Comunitat ha pasado de ser "el paradigma de la corrupción y la decadencia" a ser "pionera en innovación" y tener todos los indicadores económicos y sociales mejor que en 2015, y ha hecho un llamamiento a debatir "en positivo" y eliminar "una crispación que viene importada y que sinceramente no existe" aquí.
"Es lamentable que la oposición quiera reavivar la crispación, porque no tiene alternativa en la Comunitat Valenciana", ha manifestado el dirigente socialista, quien ha lamentado la "ambición de intentar destruir, sin alternativas, sin solvencia, con oportunismo y muchas veces con bastante amoralidad" de la oposición.
El presidente ha replicado al candidato del PP a la presidencia de la Generalitat, Carlos Mazón, que estas elecciones autonómicas no son "un predebate" de las generales, y que la Comunitat Valenciana "no debe ser objeto de deseo partidista", pues es "mucho más importante que un trofeo para nadie" .
Los socialistas "siempre afirmaremos que la primera legitimidad y la primera lealtad es con el pueblo valenciano, no pueden decir lo mismo" en el PP, ha afirmado Puig, quien ha resaltado que lo que se juega el 28M es cómo avanzar en sanidad, educación o servicios sociales y cómo seguir creciendo económicamente en la Comunitat.
Preguntado sobre si le preocupa que el proyecto liderado por Yolanda Díaz Sumar les pueda restar votos, Puig se ha limitado a señalar que cada proyecto tiene "su espacio" y "su vocación" y que respeta lo que hacen otras formaciones políticas, desde Podemos a Compromís e incluso "los partidos que quieren simplemente erosionar la democracia".
Tampoco ha querido entrar en la acusación de Podem de que Compromís bloquea que los morados entren en Sumar: "Yo no quiero inmiscuirme en absoluto en lo que es un una decisión que tienen que tomar las distintas direcciones; lo único que pido es que siempre se mire por el interés general y por cómo mejorar la sociedad, no por cómo fortificar su propio espacio".
