La
Comisión de Salud Pública se reúne hoy para tratar medidas una vez
Ómicron da señales de agotamiento. La reunión se celebrará a las
cuatro de la tarde, y uno de los temas estrellas será la duración
de las cuarentenas para contactos estrechos y positivos, actualmente
establecidas en siete días para asintomáticos y personas con
síntomas leves.
Varias
comunidades han mostrado su interés en que ese plazo se acorte de
forma que se puedan combinar salud y economía . Galicia por ejemplo
cree que debería reducirse a 5 días, Castilla La Mancha sostiene
que bastarían 3 días de aislamiento para estar seguros de que el
riesgo de expansión es controlable. Mientras que algunas comunidades
se muestran partidarios de recortar pero sin dar plazos. En este
último grupo se encuentra la Comunitat Valenciana que cree
que es posible reducir los plazos pero no ahora, Cataluña que cree
que la pandemia se podría gestionar sin bajas desde abril, y Madrid
que se escuda en una enrevesada declaración en la que pide que el
plazo se calcule teniendo en cuenta la incidencia nacional e
internacional.
Frente
a estas se encuentra la postura de Andalucía y Castilla León que se
muestran contrarias a cualquier modificación de las bajas, al menos
en este momento de la pandemia.
El
Ministerio de Sanidad, por su parte, sigue asegurando que los plazos
del aislamiento se determinan por un procedimiento marcado: los
miembros de la ponencia de alertas elevan su propuesta a la comisión
de Salud Pública y ahí son las comunidades las que votan si se
acepta o no.
Otros
puntos que se abordarán serán el calendario de vacunación
coordinado para 2022, y el cambio de contabilización de datos
epidemiológicos (la famosa "gripalización" de la COVID-19).
Aunque las previsiones es que este asunto se siga estudiando y no
haya ninguna novedad esta semana, la ministra Carolina Darias ya ha
apuntado a que hay que empezar a distinguir las muertos positivos en
Coronavirus, pero que han fallecido por otras dolencias, con los
muertos por la enfermedad COVID-19.