Serafín Castellano: "En política, trabajar para uno mismo es un error".

Después de 12 años en el plano de la política local como alcalde de Benisanó, entre otras ocupaciones, Serafín Castellano da el salto a política nacional como Delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana. Casado y padre de dos hijas, este abogado de 49 años, se muestra serio y responsable ante su nuevo cometido. Aunque, en el fondo y a pesar de ser un político de raza, lo que más desea es seguir siendo uno más en su Benisanó natal.

- Ha estado mucho tiempo en la política autonómica ¿no le da vértigo dar el salto a la política nacional?

- No, después de una etapa muy intensa y apasionante, tanto en la Administración Local como en la Autonómica, al frente de distintas consellerias, la verdad es que era una gran oportunidad iniciar una nueva etapa política, en este caso en la Administración General del Estado. La afronto con ilusión, motivación y con mucha responsabilidad para intentar mejorar y trabajar por el crecimiento y el bienestar de la Comunitat Valenciana.

- ¿Cuál es la hoja de ruta que va a seguir como Delegado de Gobierno?

- Sobre todo, mantener los puentes lo más sólidos posible, entre la Administración del Estado y la Generalitar. Poder solventar los temas que hay encima de la mesa entre el Generalitat y el Gobierno de España y dar una gran fluidez a las relaciones entre los valencianos y el Gobierno Central. De lo que se trata es de ayudar a solucionar esas cuestiones.

- ¿Cuál es la función exacta del Delegado del Gobierno?

- Las principales son la dirección y planificación de las administraciones periféricas del Estado. Atender cuestiones de orden público, sobre todo lo que tenga que ver con la Policía Nacional y la Guardia Civil y todas las relaciones del Estado con la Comunitat Valenciana. Es una carga de trabajo muy importante e intensa y en ese sentido se debe facilitar la tarea, desde el la administración periférica con los distintos ministerios del gobierno de España.

- Su predecesora, Paula Sánchez de León, vivió unos polémicos episodios relacionados con la actuación de la Policía Nacional en alguna concentración en Valencia. ¿Cómo afrontaría usted un hecho como ese?

- Yo creo que en el tema de Interior, lo importante es que no sea noticia y mantener la máxima normalidad y que se cumplan la normativa y la ley. Creo que Paula Sánchez de León tuvo una etapa con muchos aciertos como delegada y en ese sentido, los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado están para garantizar los derechos y libertades de los ciudadanos que están establecidas en la Constitución y en el Estatuto de Autonomía. Lo que está claro es que en un Estado de Derecho siempre hay que garantizar los derechos y libertades de los ciudadanos.

- ¿Tiene miedo de vivir un episodio así?

- No. Las responsabilidades se deben asumir y en cualquier situación de la vida o profesional hay que estar a las duras y a las maduras, por lo que se deben hacer las cosas, siempre, a través del cumplimiento de la ley, los protocolos establecidos y por tanto, estar al frente de una responsabilidad como esta, comporta una toma de decisiones y siempre pensando en el interés general.

- ¿Ya ha hablado con Rajoy sobre su nuevo cargo?

- Le he agradecido al presidente del Gobierno y al Consejo de Ministros la confianza puesta en mí y por tanto voy a dejarme la piel en este cargo, como he hecho siempre, para no defraudar las expectativas, tanto de Rajoy como del resto de ministros.

- ¿Le han dado algún consejo?

- Al final en tiempos difíciles, como este, es cuando más se tiene que reivindicar la política. En los momentos complicados es cuando hay que demostrar la responsabilidad, la seriedad y dar un paso adelante. Cuando las cosas son fáciles, todo tiene menos mérito y cuando se complican un poco es cuando se tiene más mérito. Así hay que afrontar las cosas desde el inconformismo. Hemos pasado una etapa complicada y ahora ya estamos en la etapa de la recuperación y en ese sentido hay que trabajar.

- Durante toda su trayectoria política, desde que fue alcalde de Benisanó hasta ahora ¿de qué se enorgullece y de qué se arrepiente?

- Ser alcalde de tu pueblo siempre es una satisfacción y un honor. Cada responsabilidad que he tenido ha sido diferente. Servir a los valencianos desde la Generalitat también ha sido un honor y por tanto, creo que, aunque no sea adecuado decir esto, la política es una vocación, un servicio público muy noble y aunque ahora tenemos mala imagen, siempre reivindico la política y trabajar por los demás. Siempre lo hecho y ahora lo hago desde la Administración General y lo voy a hacer con la máxima ilusión y responsabilidad posible.

- No me ha dicho de qué se arrepiente

- Seguramente de no haber podido dedicar todo el tiempo que me hubiese gustado tanto a mi familia como a mí mismo.

- ¿Echa de menos la política local?

- Estuve doce años. Cada Administración tiene características y condiciones y al final lo importante es poder hacer cosas en beneficio de la sociedad. Yo sigo viviendo en Benisanó como uno más, desde el principio y ahí sigo y a lo que aspiro es a seguir siendo uno más en mi pueblo.

- Algunos piensan que la Delegación del Gobierno es un retiro dorado por los servicios prestados durante este tiempo

- Ojalá fuese así. Pero todo lo contrario. Tengo mucho trabajo y no hace ni una semana que aterricé aquí. Ya estoy desbordado. Dentro de las competencias de la Delegación hay muchos temas que solucionar. Por lo que no veo que eso sea ningún retiro dorado, sino todo lo contrario.

- En poco tiempo ha dejado de ser conseller y de dirigir el PP a nivel provincial. Algunos piensan que esta nueva situación es por los resultados obtenidos en las últimas elecciones Europeas

- Cada uno que piense lo que crea conveniente. Yo me he caracterizado siempre en seguir mis propios criterios, leer los tiempos en política, que creo que es de lo más importante y por tomar las decisiones que son más apropiadas. Tenía la oportunidad de poder trabajar en la Administración del Estado y era el momento apropiado y por tanto, en política hay que estar al servicio de los ciudadanos y al servicio de un proyecto como es el del Partido Popular. Pero hacerlo siempre desde la humildad y la generosidad. Siempre he intentado hacer mi trabajo, sea cual sea, lo mejor posible. Obviamente, si fuese por los resultados, la Comunitat Valeniana está tres puntos por encima de otras regiones. Con lo cual, ni los resultados son extrapolables y además, son un problemas globales ya que los problemas que puedan tener los dos grandes partidos tienen que ver con la crisis y el desapego. Me siento satisfecho con mi trabajo.

- Ha trabajo al lado de todos los presidentes del PP que ha tenido la Generalitat. ¿Con quién repetiría y con quién no volvería a trabajar?

- He tenido esa suerte y lógicamente cada presidente ha tenido unas características, una personalidad y unas formas de hacer, conforme a su personalidad. Creo que lo importante es trabajar por un proyecto porque trabajar por uno mismo es un error. Se tiene que trabajar por la sociedad y en todas las responsabilidades he tenido la misma filosofía. Fabra entró en un momento complicado y ha demostrado que ha estado a las duras y a las maduras. Y gracias a su trabajo, confío en que volveremos a recuperar la confianza del ciudadano.

- ¿Qué cargo le queda por ocupar? ¿Tal vez el de president de la Generalitat?

- Sí, tal vez sea de los pocos que me quede por ocupar. Pero como te he dicho tenía esta oportunidad y he iniciado esta etapa en la que colaboraré al máximo con la Generalitat. En mi toma de posesión dije que yo siempre pienso, hablo y siento en valenciano, por lo que siempre defenderé los intereses de la Comunitat.