Som Valencians Gandia ha dado cuenta públicamente, a primera hora de
esta tarde, del lamentable estado en el que se encuentran algunos barrios de
Gandia, carentes de servicios básicos y con numerosas deficiencias que implican
un gran riesgo para los vecinos. Chimo Canet, dirigente de Som Valencians
Gandia, ha contrapuesto dos ejemplos, el del barrio de Benepeixcar y el de la
urbanización del Mollo de la Creu, que cuenta con deficiencias graves que, como
ha advertido el valencianista, "si, finalmente, acabaran por causar algún daño
o perjuicio a los vecinos del lugar, conllevará una demanda de nuestra
formación a los dirigentes del tripartito. Tanto los vecinos de Benepeixcar
como los del Mollo de la Creu pagan sus impuestos. En Som Valencians estamos
hartos de que los representantes echen balones fuera y culpen de la situación a
la incompetencia de los arquitectos e ingenieros que diseñaron el plan
urbanÃstico. Más bien creemos que responde a la inutilidad de los polÃticos
que, habitualmente, han dirigido las áreas de Urbanismo y Medio Ambiente,
dentro de una u otra corporación. Tanto es asà que la bomba de presión del agua
potable está enganchada al luminario público, las malas hierbas encima de las
casas y, como compensación, la Guardia Civil multa a los vecinos por no tener
una entrada como toca y cometer infracciones para poder acceder, en una zona
donde no existe un simple carril de servicio. Tanta deficiencias que uno se
plantea si ésta es la Gandia del S.XXI".
Canet ha recordado que "el Ayuntamiento es la casa de todos y debe velar
por los intereses, seguridad y bienestar de sus ciudadanos, asà como por su
calidad de vida, a través de servicios eficientes. En el caso de Gandia no se
cumple, ni por asomo, con esta premisa. Y es que, en esta ciudad, hay
ciudadanos de primera, de segunda y no se de cuántas categorÃas más, ya que
depende de donde vivas y qué polÃtico viva cerca que seas más o menos que
otros, a pesar de que todos pagamos los impuestos que nos reclaman. Dejando de
lado el mayor o menor número de categorÃas de ciudadanos de Gandia, sà que
podemos clasificar, claramente, dos tipos de barrios: los barrios abandonados y
los barrios sobreatendidos. Entre ellos, reparcelaciones donde no falta detalle
y lugares donde no hay nada, barrios como el de Benipeixcar, donde iba a vivir
el alcalde, o urbanizaciones como la del Mollo de la Creu, donde ninguno de los
representantes, de uno y otro signo polÃtico, irÃan a vivir jamás. En el
primero se hicieron avenidas amplias, se restauraron calles, se contemplaron
más zonas verdes, peatonales, parques infantiles y otros tantos espacios para
el disfrute de los vecinos; mientras que, por el contrario, urbanizaciones como
la mencionada no tienen las mÃnimas condiciones de habitabilidad, cuenta con
calles mal conectadas, tiene una accesibilidad reducida, zonas intransitables,
zonas inundables, una clamorosa falta de limpieza, zonas selváticas que
conllevan un riesgo de incendio, que se suma a la falta de adecuación de
accesos para el paso de organismos de emergencia. No es necesario subrayar, más
allá de estos ejemplos, que la situación es insostenible y lamentable".
El dirigente de Som Valencians en La Safor ha concluido dejando claro
que "podrÃa parecer que la solución es fácil y de sentido común, pero, para
ello, los polÃticos del tripartito no deben querer sacar beneficios y, por el
contrario, deben arremangarse y ponerse manos a la obra. Pero, como digo, los
gobernantes de Gandia piensan que estos vecinos son ciudadanos de tercera y no
merece la pena atenderlos. Y lo creo porque, si no fuera asÃ, habrÃan hecho
algo ya; si no lo han hecho, la razón es de cajón: allà arriba, en esa
ubicación, el tripartito no tienen publicidad, no es una acción visible para el
resto de ciudadanos. Ellos, si no tienen beneficios, no invierten".