Toni Gaspar, diputado provincial, alcalde de Faura y candidato en las primarias del PSPV-PSOE. FOTO EPDA- ¿Por qué ha dado el paso de presentarse a las primarias?
Porque creo que ahora
es el momento de una nueva forma diferente de hacer política, más en
consonancia de lo que requiere la sociedad, porque hay una generación que
estamos cansados de no conseguir el respaldo de la mayoría de los valencianos.
Llevo un año largo visitando muchas agrupaciones socialistas de toda la
Comunidad y creo que era necesario ofrecer una alternativa para que, al menos,
militantes y simpatizantes puedan escoger quién cree que puede ser el mejor
candidato para las elecciones de 2015.
- ¿Cómo valora el proceso hasta ahora?
Ha habido un proceso de
recogida de avales que nos han permitido contar con el respaldo suficiente para
garantizar mi candidatura y, por lo tanto, que pueda haber primarias. Ahora se
abre un escenario nuevo, donde tenemos que conseguir que los ciudadanos se
sumen a este proceso. Yo confío en que consigamos que sean muchos y que la
mayoría piensen lo mismo que me han transmitido en todos los actos que he hecho
hasta ahora: que es necesario un cambio.
- Ha realizado alguna crítica a su adversario por no dejar la secretaría
general mientras dura el proceso...
Creo que es una
petición coherente. Por el bien de la transparencia del proceso, y como se hace
en otras federaciones, un cargo orgánico que esté en una candidatura debe dejar
aparcada su responsabilidad del partido para que las dos candidaturas estemos
en igualdad de condiciones. Creo que es lo lógico.
- El aparato del partido -con las clásicas familias de siempre- ¿ha ayudado
mucho al secretario general o le ha entorpecido mucho a usted en la busca de
avales?
Mis avales han sido del
militante de base, recogido casi de uno en uno. No cuento con un aparato
orgánico que pueda activar para recoger avales.
- ¿Qué aporta usted que lo diferencia de Ximo Puig?
Creo que una visión
diferente de cómo hacer política. Esta claro que compartimos política y la base
programática, pero tal vez el hecho de ser de generaciones distintas creo que
influyen es esa forma diferente de afrontar las cosas. Yo no cuento con
familias históricas que me apoyen, y creo que también es una diferencia
significativa.
- ¿Cree que puede ganar a quien controla el partido? ¿Las primarias están bien
planteadas como opción abierta a la sociedad o puede haber manipulación?
Entienda que crea que
unas primarias abiertas que muchos venimos reivindicando hace tiempo es una
buena decisión. Si creyera que quien controla el partido es la única opción de
ganar, pues no me habría presentado. Cada día que pasa, cada acto que hacemos,
cada agrupación que visitamos me hace estar más convencido de que es posible un
cambio. Y confío en la limpieza del proceso, por descontado.
- ¿Es el momento del cambio en la Comunitat Valenciana?
Es necesario. Estamos viviendo el final de un régimen, el del Partido Popular, donde existe un vacío de poder que no aborda los problemas importantes de todos los valencianos. Creo que el sistema se desmorona, con la desaparición de entidades financieras valencianas, sin radio ni televisión públicas, con una deuda asfixiante. Sin duda es necesario un cambio.
- El PSPV-PSOE vende ese cambio junto a EU y Compromís, un tripartito que puede
diluir a los socialistas. ¿El Partido Socialista ha dejado de ser una
alternativa al PP por sí solo?
No lo creo. El Partido
Socialista debe tener vocación de mayoría, como lo tiene en muchísimos
municipios y comunidades. Debemos dar respuesta, credibilidad y confianza a
toda la gente progresista que alguna vez nos han apoyado. No me resigno a ser
una tercera parte de la solución.
- Imaginemos que gana usted las primarias, ¿cómo imaginaría un gobierno con los
socialistas en el poder?
El que yo quiero presidir sería un gobierno que priorizaría desde el primer día las necesidades de las personas, invirtiendo en aquello que realmente es necesario para las personas. Me plantaría donde hiciera falta para conseguir el dinero necesario, y que nos corresponde, para poder invertir en los valencianos y en la calidad de los servicios públicos. Además, no puede ser que estemos invirtiendo más en pagar intereses de deuda que en educación, por ejemplo. Y por supuesto, la transparencia sería eje prioritario de mi gestión, a todos los niveles.
