Rey Gaspar en la cabalgata del municipio valenciano Carlet. FOTO EFE.
Este hecho, según ha informado a EFE el concejal de fiestas, Josep Mur, se produjo con su conocimiento y el consentimiento de los organizadores, y generó "risas y aplausos entre los asistentes".
"El rey me pidió permiso para hacerlo y yo le dije que hablase con los organizadores. Ellos le dieron el visto bueno, de forma que la petición de mano se produjo al principio del acto, y en lugar de un regalo, el rey Gaspar entregó a su novia un anillo. Fue algo gracioso que en ningún momento generó polémica", ha detallado Mur. Habitualmente, tras finalizar la cabalgata los Reyes Magos de esta localidad se desplazan a un teatro, donde entregan regalos a aquellos niños que previamente han sido inscritos en una lista por sus padres.
"Una de las primeras llamadas que se produjo fue a la novia, el momento no duró más que cualquier otra entrega de regalo, y el rey ni besó a la mujer ni se quitó el disfraz", ha explicado Mur.
"Hay quien dice que no era el sitio, pero estoy convencido de que quienes critican este hecho no estaban en la sala. No hubo ningún abucheo. Creo que fue gracioso y correcto", ha concluido el concejal.
