Antonia Fernández, hermana de Ángel Fernández, que murió al finalizar la Guerra Civil y desde 1963 está enterrado en la Basílica de la Santa Cruz del Valle de los Caídos, muestra una foto de su hermano para el que ha reclamado su exhumación para trasladar los restos a un panteón familiar. En la imagen junto a Montserrat Martínez, sobrina de Ángel Fernández. EFE-Kai FörsterlingLa familia de Ángel Fernández, que murió al finalizar la Guerra Civil y desde 1963 está enterrado en la Basílica de la Santa Cruz del Valle de los Caídos, ha reclamado su exhumación para trasladar los restos a un panteón familiar.
Su hermana Antonia, de 87 años, que reside en el municipio valenciano de Alfafar, asegura a EFE sentirse "muy emocionada" y "con muchas ganas de llorar" porque quiere sacar a Ángel y llevarlo a Minaya (Albacete), el lugar donde están enterrados sus padres, sus abuelos y sus siete hermanos.
Se trata de la primera familia valenciana que ha pedido la exhumación de un cuerpo del Valle de los Caídos, en cuyas criptas están enterrados los restos de cerca de 34.000 personas, de las que casi 13.000 están sin identificar.
Al parecer, Ángel Fernández murió asesinado en la provincia de Teruel por un francotirador cuando, al acabar la guerra, intentaba regresar a su pueblo junto a su primo, y fue enterrado en el cementerio de la capital de esa provincia.
Cuando sus familiares llamaron a este camposanto para averiguar su paradero, les informaron de que sus restos habían sido trasladado al Valle de los Caídos, donde están depositados en una cripta desde el 26 de octubre de 1963.
"Mi madre pensaba que Ángel estaba enterrado en alguna cuneta, nunca supo donde estaba", afirma Antonia, que recuerda que la última vez que lo vio fue cuando fue reclutado a los 18 años pero siempre tiene presente la imagen de su hermano sobre una yegua roja que tenían y que al llegar a casa "la jaca se hincaba de rodillas para que bajara".
"Era muy bueno, buenísimo, nunca dijo una palabra fea, lo único que decía era 'me cago en diez", afirma Antonia, que señala que Ángel "no tenía ninguna idea política, se fue porque se lo llevaron a la mili".
Aún no les han dejado ir a visitarlo y desde la Basilica les han dicho que es "imposible" sacarlo de allí porque "habría que quitar toda la capilla".
Ahora, con la noticia de la exhumación de Francisco Franco, que consideran se debía haber hecho antes, tienen "esperanzas" en poder realizar uno de los últimos deseos de Antonía, que afirma que no vivirá bastante como para ver ese momento.
Montserrat Martínez, sobrina de Ángel Fernández, asegura que esta reclamación se ha agilizado en los últimos meses gracias a la ayuda de Matías Alonso, coordinador del Grupo Recuperación de la Memoria Histórica (GRMH), quien asegura a EFE que se trata de "uno de los casos más sencillos de resolver, porque saben exactamente donde está".
La familia cuenta con un documento firmado por Fernando Fuertes de Villavicencio, que fue segundo jefe e intendente general de la Casa Civil de Francisco Franco, en el que cita el columbario, el piso, la cripta y el número de inscripción en el libro de inhumaciones donde se encuentra Ángel Fernández.
"Es un documento que no tienen todas las familias", asegura Montserrat Martinez, que añade que su tío no falleció en el Valle de los Caídos, lo llevaron allí desde otro cementerio, y "no es normal que tengamos que esquivar el lugar donde está enterrado el dictador para poder verlo".
Desde la gerencia de Patrimonio Nacional les han comunicado que analizarán la "viabilidad" de la exhumación solicitada "en función de los condicionamientos físicos, jurídicos y económicos que la misma plantea" y que también se tendrá en cuenta su petición de visitar la Basílica.
Por su parte, Matías Alonso explica que Ángel Fernández fue "un soldado que intentaba regresar a su pueblo, no se le reconoce actividad política" y en el invierno del 39, en Teruel, fue alcanzado por un francotirador o una patrulla que iba por la zona.
