Si tus uñas tienen un aspecto mortecino y parecen haber perdido vitalidad puedes frotarlas con un algodón empapado en vinagre de vino blanco, a continuación enjuagalas en agua tibia y abrillantalas con un paño suave.
El aceite de oliva es un buen remedio en caso de que tus uñas esten secas y se partan y agrieten con facilidad. antes de dormir masajealas con un algodón mojado ligeramente en aceite de oliva. luego las secas sacando brillo. Repite la operación varias veces a la semana y verás que mejorÃa.
