Unión: se puede

De muy positivo podemos catalogar el hecho que se produ­jo la semana pasada en España. Y es que cuando hay voluntad de avanzar, superando obstáculos, aparcando diferencias y predomi­nan las ganas de aunar esfuerzos, las ideas y principios ideológicos se aparcan prevaleciendo el bien común.

 

Para un partido independiente como PAU, Per Albalat Unit, don­de su nexo de unión, es el interés general de la población que nos ha visto nacer, lo sucedido hace escasos días en las Cortes Gene­rales es un auténtico triunfo de la cooperación, la unidad y el racio­cinio.

 

PP, PSOE, CIU, PNV, UPyD, CC y UPN, todos juntos, uno a uno, formando una sola voz y en una sola dirección, acordaron mante­ner una postura idéntica y sólida, con la suficiente altura de miras, para decir a Europa en la recien­te cumbre de final de la semana pasada en Bruselas que, todos apuntan a las mismas soluciones para erradicar los males que nos están ahogando en el cieno a un país fuerte, venido a menos como el nuestro.

 

Los puntos que se han consen­suado hacen mención a la nece­sidad de avanzar hacia la unión bancaria, fomentar el empleo juve­nil y aumentar los fondos europeos destinados a las pequeñas y me­dianas empresas, base de nuestra delicada economía, siendo estos apartados los más significados.

 

Buena estela nos dejan como muestra los representantes ma­yoritarios del espectro político de este país, tanto conservadores, li­berales, socialdemócratas, nacio­nalistas tanto vascos, catalanas canarios y navarros, progresistas y unionistas en definitiva. ¿Cuál es el motivo? Sencillo: ¡quieren!

 

Algo tendremos que reflexionar todos en nuestra parcela política, para darnos cuenta que cuando la convergencia es deseada, prima por encima de todo la eficacia del entendimiento, del dialogo y no de la divergencia, del egocentrismo y partidismo.

 

Acción y reacción, causa y efec­to, principio y final, origen y desti­no. En nuestros pueblos y ciuda­des buena falta de estas dosis de coincidencias políticas nos hacen falta. Y para empezar, sólo una re­ceta es posible para lograr tan ne­cesaria quimera para mejorar en todos los aspectos, y su nombre es claro y sencillo: unión. En el pasa­do mundial de fútbol de 2010 que ganó por primera vez España se hizo famosa el eslogan, "podemos". En este caso lo que aquí propone­mos es similar. UNIÓN: queremos.